AMUS, Asociación por el Mundo Salvaje, junto a otras organizaciones como Adenex, Ecologistas en Acción o SEO/BirdLife acaban de presentar alegaciones ante las autoridades competentes de la Junta de Extremadura y de Castilla y León oponiéndose a una serie de proyectos de instalación de aerogeneradores que "enmascaran un macroproyecto eólico cuya ubicación es el sur de Salamanca, afectando sinérgicamente a comarcas extremeñas como son Sierra de Gata o Hurdes entre otras".

Los efectos de este tipo de plantas de producción eléctrica son "ya de sobra conocidas por la sociedad", su incidencia sobre las grandes aves "está documentada (impactos por colisión, abandono de las áreas por las molestias que se generan, efecto barrera…) así como la afectación sobre el medio físico en concepto de impactos inducidos y directos (pistas de acceso, subestaciones, tráfico rodado, líneas eléctricas nuevas, deforestación, pérdida de identidad paisajística…)".

Según AMUS, "esto no deja de ser un despropósito que vuelve a hacer aguas sobre un desarrollo que nos dijeron que era sustentable, democrático y favorecedor de la cultura y de los valores patrimoniales".

Estas áreas rurales vuelven a ser "sorteadas por las grandes fuerzas económicas del sector y políticas en aras a un crecimiento con fecha de caducidad". Para estas asociaciones, los recursos endógenos de las mismas reafirman el potencial biológico, cultural, etnográfico y paisajístico de una gran área montañosa espectacular con un turismo en alza en la que se entrelaza aspectos y elementos únicos de  dos comunidades autónomas como son la castelloleonesa y la extremeña".