La portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha reclamado este jueves “un acuerdo de país” para mejorar las condiciones laborales de los bomberos forestales. De Miguel, que ha defendido una propuesta de pronunciamiento en la Asamblea de Extremadura, ha asegurado que hay que impulsar el Estatuto de Bomberos forestales para “acabar con la precariedad del colectivo”, así como la Ley de Coordinación de Servicios de Prevención y Extinción de Incendios para “lograr una adecuada coordinación entre territorios”.
La portavoz ha asegurado que “de nada sirve aplaudir a los bomberos durante el verano si nos olvidamos de ellos cuando acaba la campaña de alto riesgo de incendios”. Además, ha destacado las enormes diferencias en las condiciones laborales de este colectivo según la comunidad autónoma en la que se trabaje, y ha señalado que en Extremadura la situación no es de las peores “si lo comparamos, por ejemplo, con Castilla y León donde el grado de precariedad es máximo”.
Por ello, ha insistido en que la propuesta que ha defendido es necesaria “porque hay que dignificar las condiciones laborales de este colectivo”. “La iniciativa que defendemos – ha añadido – contempla que todas las comunidades autónomas actúen de la misma manera porque lo que ocurre en otros territorios también nos afecta aquí, y este verano lo hemos visto con el fuego de Las Hurdes y Salamanca”.
De Miguel también ha reclamado que en Extremadura se ponga en marcha la categoría profesional de bombero forestal, “a lo que están obligados por ley”. “No la de bombero forestal conductor, que no engloba ni reconoce ninguna enfermedad profesional”, ha asegurado.
“No podemos permitir -ha insistido la portavoz- que los bomberos forestales de Extremadura estén acogidos al mismo código de actividad económica que los funcionarios que están en una oficina”.
Por otro lado, la portavoz de Unidas por Extremadura también ha solicitado en el pleno de la Asamblea que se ponga en marcha el Plan Forestal de Extremadura cuanto antes. En la comparecencia a petición propia sobre Política Forestal, De Miguel ha instado a la consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio a que presenten ese documento, “ese que anunciaron en julio de 2020 que iba a llevar a cabo Tragsatec, pero que más de dos años después y 380.000 euros, aún no está el Plan Forestal que venga a plantear una gestión más sostenible, integrada en la estrategia de lucha contra el cambio climático y la despoblación”. La portavoz también ha aprovechado la ocasión para denunciar que la política de gestión forestal está provocando el abandono por parte de los extremeños de las actividades sostenible en los montes, como puede ser, por ejemplo, el sector resinero.
De hecho, ha lamentado que el gobierno de Fernández Vara apueste por las empresas resineras, pero no por los resineros extremeños. “Si un resinero solicita dos matas y ofrece dos puestos de trabajo, ustedes se lo deniegan, pero si embargo sí que lo aprueban para las empresas, como está ocurriendo en Jarandilla de la Vera, que una sola empresa de Castilla y León está gestionando el monte. Para los resineros de La Vera no, pero para la empresa de Castilla y León sí”. “Así de crudo, y así de real”, ha dicho.
“A las empresas alfombras rojas, como siempre”, ha continuado De Miguel, quien ha añadido que precisamente esas empresas están pagando salarios bajos y no generan tejido productivo y social. “¿A usted le parece bien que algún resinero tenga que dormir en el coche? Pues esa es la cruda realidad de su política forestal, señora consejera”, le ha dicho.
Además, también ha pedido que se cambien los protocolos contra la tuberculosis para poder fomentar la instalación de explotaciones de ganadería extensiva en la región. “Les auguro un escaso futuro a las nuevas explotaciones si no se empieza a gestionar la tuberculosis animal de otra manera porque la enfermedad convive, en las zonas de vocación cinegética, con los animales de la ganadería extensiva”.
“Esta sería una medida eficaz de gestión forestal”, ha añadido De Miguel, quien también ha dicho que lo sería mucho más que la creación de naves de rebaños de cabras que puedan hacer de rebaños de bomberos. “Una medida -ha dicho- que nos parece bien, pero la que necesita de más transparencia porque hay cabreros que no entienden por qué a ellos no se les ofrece lo que se les está ofreciendo a otros que ni viven en los municipios donde los rebaños de bomberos se van a instalar”.
