Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de Valencia de Alcántara (Cáceres), han llevado a cabo la investigación penal de un hombre, relacionada con el incendio forestal ocurrido el pasado 7 de agosto en el término municipal de esta localidad, en la zona conocida como Virgen de la Cabeza.
La investigación por estos hechos se desencadenó, cuando los agentes del SEPRONA tuvieron conocimiento del incendio forestal que se había declarado en mencionada área.
Este se mantuvo activo y sin control durante 48 horas, siendo estabilizado dos días después, controlado el día 11 y finalmente extinguido el 22 de agosto. Debido a su cercanía a áreas habitadas, el incendio fue declarado en dos ocasiones como nivel uno, lo que llevó al desalojo de tres complejos de casas rurales y un cortijo habitado, afectando a un total de 50 personas.
El incendio afectó a una superficie de más de 318 hectáreas de terreno, que incluía una diversidad de especies arbóreas como eucaliptos, castaños, encinas y alcornoques, así como una masa forestal de pasto y matorral.
El incendio forestal ocurrido en Valencia de Alcántara
Desde el primer momento, los agentes del SEPRONA actuaron de manera eficiente para acotar la zona de inicio del incendio, y una vez que los medios de extinción controlaron la situación, se enfocaron en investigar las causas del mismo.
Las pruebas recopiladas durante la investigación, indican que el fuego no se originó en el punto de inicio como tal, sino más bien sobre él, es decir, donde los cables del tendido eléctrico aéreo de alta tensión entraban en contacto con las copas de los árboles. Esta interacción de los cables con las ramas pudo inducir un arco eléctrico que, combinado con el tipo de combustible presente (ramaje fino y hojas secas), provocó una inmediata ignición de los materiales incandescentes que caían al suelo.
Como resultado de la investigación, con las pruebas e indicios obtenidos, se ha procedido a la investigación penal, por un delito de incendio forestal por imprudencia grave, del propietario de la línea eléctrica en cuestión, al no haber llevado a cabo las obligatorias labores de mantenimiento de la línea de alta tensión, en concreto, al no justificar las acciones de mantenimiento de la masa arbórea existente bajo el tendido eléctrico.
Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Valencia de Alcántara.
En la foto de la noticia, el incendio forestal ocurrido en Valencia de Alcántara.
