El director general de Desarrollo Rural, José Luis Gil Soto, ha pedido a las organizaciones profesionales y representantes del sector agrario extremeño responsabilidad en sus propuestas de cara a las negociaciones con el Ministerio y la Comunidad Autónoma de la nueva Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2014-2020, tras el acuerdo alcanzado en el trílogo europeo.

Así, ha indicado que es importante tener una visión de futuro y negociar pensado "más en el 2020 que en el 2014", ya que en su opinión "un buen diseño del programa actual facilitará al campo extremeño la adaptación para cuando ya no lleguen las ayudas", según declaró en el acto de inauguración de las VI Jornadas del Ovino que se celebran en Campanario. "Más importante que el dinero que llegue en 2014 será el que no llegue a partir de 2020", destacó.

En relación con los fondos europeos, José Luis Gil indicó asimismo que "buena parte de ellos están destinados a realizar cambios estructurales en nuestro medio rural, una situación que el sector agroalimentario debe saber aprovechar". Cambios estructurales entre los que destacó los proyectos destinados a la innovación, mejoras de las infraestructuras y de las estructuras de comercialización, así como a la formación y especialización de los empresarios del sector.

En este sentido, aludió al segundo pilar como arma fundamental para realizar los cambios estructurales que "nos preparen para ser razonablemente competitivos" tras el punto de inflexión que se producirá con toda probabilidad en 2020.

Así, animó a los ganaderos presentes en el acto a "aprovechar las oportunidades que ofrece el segundo pilar, el del desarrollo rural, por parte del sector agropecuario y la silvicultura", pues el reglamento europeo está pensado fundamentalmente para el sector primario y con demasiada frecuencia tendemos a "menospreciar el segundo pilar sin reflexionar lo suficiente acerca de su importancia y las oportunidades que ofrece", tras lo cual puso ejemplos de líneas de ayudas que salen del Programa de Desarrollo Rural, tales como las infraestructuras, las mejoras de explotaciones, la incorporación de jóvenes o la reciente ayuda a la dehesa, entre otras muchas.

Por otro lado, el director general destacó el valor que para el sector tiene la reforma de la PAC aprobada ayer. En cuanto a los detalles de esta reforma, Gil Soto ha apuntado que los estados miembros tienen mucho margen en cuanto a decisiones que pueden afectar directamente a los productores, y que ahí la Consejería está haciendo y va a seguir haciendo un gran esfuerzo por defender los intereses de Extremadura.

Igualmente, manifestó a los ganaderos de ovino presentes que es consciente de que la flexibilización de la tasa plana probablemente no ha gustado al sector ganadero extensivo de la región, que prefería la propuesta de Europa, aunque tras el acto de inauguración aclaró que "queda todo por hacer en la regionalización" que es donde está la clave para saber definitivamente cómo queda cada sector.

Durante el acto, Gil Soto ha dicho "no estar plenamente de acuerdo con la reforma", aunque sí "muy satisfecho por los logros del Ministerio", pues reconoció el gran esfuerzo realizado por el ministro y su equipo, que han conseguido mejorar sustancialmente la propuesta inicial recogiendo buena parte de las reivindicaciones del consejero de Agricultura extremeño, José Antonio Echávarri.