La organización conservacionista AMUS ha vuelto a denunciar con indignación el ingreso en su hospital de fauna de una especie protegida abatidas por disparos. En concreto se trata de un ejemplar de Búho Real que ingresó con hasta dieciocho perdigones en su cuerpo.

El ejemplar ingresó el pasado miércoles y la radiografía que se muestra en la imagen corresponde a un joven Búho real. En su admisión en el hospital de AMUS  se le han contabilizado dieciocho perdigones alojados de manera desigual por distintas partes de su cuerpo.

Por algunos de estos plomos y por el impacto contra el suelo presenta cinco fracturas, cuatro en alas y la última en una de las patas. Los días que ha soportado hasta ser encontrado, le han conducido a un estado de salud de máxima gravedad ya sea por la pérdida de sangre de las numerosas heridas, por la infección, por la falta de ingesta así como por el destrozo en tejidos blandos por las astillas y fragmentos óseos rotos.

Desde su ingreso permanece en la unidad de cuidados intensivos y el equipo clínico del hospital de AMUS no se separa de él en un trabajo sin descanso para que no fallezca y poder estabilizarlo para su entrada en quirófano.

Si todo evoluciona favorablemente, aunque existen muy pocas posibilidades, será intervenido de cinco fracturas en dos operaciones ortopédicas espaciadas una de otra por 24 horas.

El colectivo ha vuelto a repudiar públicamente el comportamiento de este escopetero, que hace evidente como este sector está alejado de vivir en una sociedad respetuosa y democrática.

La asociación considera que las sociedades de cazadores tienen un gran problema en sus líneas que deben de solucionar de manera inmediata, "es inadmisible que cada fin de semana nos encontremos con este tipo de casos".

Señalan además que existen personas que actúan fuera de la ley y exoneradas "de ética, sensibilidad y una educación o cultura mínima que atisbe el valor patrimonial y el derecho a la vida de estas especies, que le pese a quien le pese no se pueden ser matadas, coman los conejos, las liebres o las perdices que coman…"