CCOO de Extremadura critica que el Partido Popular extremeño, en su afán de arremeter contra cualquier actuación de la Junta de Extremadura, ataque a los trabajadores y trabajadoras del campo y defienda el comportamiento irresponsable de los patronos, sin detenerse a reflexionar que la publicación del convenio del  campo por parte de la Administración es un acto de justicia y que beneficia al conjunto de la economía regional.

Para CCOO, el PP está comportándose en esta cuestión de una manera imprudente y con gran incoherencia, puesto que por un lado habla de que es el partido que amparará a los trabajadores y a las primeras de cambio, a la hora de la verdad, arremete directamente contra sus intereses y derechos y defiende a los empresarios en su pretensión de incumplir lo que han firmado.

Es lamentable que el PP no sea sensible a la situación de los 65.000 jornaleros y jornaleras del sector agroganadero extremeño, que sufren múltiples discriminaciones, abusos laborales y salarios indignos y prefieran, una vez más, ponerse de parte de los patronos de campo, que procuran perpetuar sus privilegios con la excusa de la crisis.

Es también indignante que el PP critique el 0,8 por ciento de incremento salarial, 37 céntimos, y argumente, con la misma demagogia de las organizaciones patronales agrarias, que ese modestísimo aumento pone en peligro la rentabilidad y la productividad de las explotaciones agrarias.

Sólo la ignorancia de la realidad de los salarios en Extremadura podría justificar las declaraciones del Partido Popular. El PP tendría que saber que ese incremento de un 0,8 por ciento es inferior al recogido en la mayoría de los convenios, está muy por debajo de la subida que están registrando los precios y se aplica sobre unos salarios, los salarios del campo, que son ya muy bajos.

Habrá que preguntar por tanto al PP extremeño si está defendiendo la congelación salarial de los 65.000 trabajadores y trabajadoras del campo de la región y cómo puede hacer compatible esto con su discurso de querer modernizar la economía y las relaciones laborales del mundo agrario y ganadero regional.

CCOO advierte que bastantes sacrificios están soportando ya los trabajadores y trabajadoras del campo, que habían aceptado moderar su actualización salarial, conscientes de la difícil situación de la economía. Y esto a pesar de que es una opinión generaliza que es fundamental para la economía del sector y del conjunto de la región que los salarios sean dignos y dejen de estar, como ahora, muy por debajo de la media nacional.

El PP no debería hablar de "decretazo" en el campo con la obligada publicación del convenio, porque habría que recordar que fue un Gobierno suyo, de José María Aznar, el que en el 2002 aprobó el verdadero "decretazo" contra el campo extremeño y que fue ampliamente rechazado por la ciudadanía en una Huelga General.

Es también incomprensible que el PP critique que la Autoridad Laboral publique y dé validez legal a un convenio que está firmado por todas las partes, puesto que la Administración lo único que ha hecho es cumplir con su deber.

Los únicos que pretenden incumplir lo pactado y firmado por ellos mismos son los empresarios del campo, que intentan ahora recortar aún más los pocos derechos de sus trabajadores con la excusa de la crisis y con la inspiración de los recortes salariales del Gobierno de Rodríguez Zapatero a los empleados públicos.