Los perros de compañía deberán identificarse electrónicamente de forma obligatoria en Extremadura y pasar a formar parte de un registro autonómico, y los gatos de forma voluntaria, en virtud de un decreto aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta aprobado el pasado viernes.

La normativa, que establece también la obligatoriedad de que los perros cuenten con el pertinente pasaporte europeo que se exige para los movimientos intracomunitarios, ha sido consensuado con las asociaciones de protección animal, las entidades locales y los colegios profesionales de veterinarios, según destacó este martes en rueda de prensa en Mérida la directora general de Explotaciones Agrarias y Calidad Alimentaria, María Curiel.

   La nueva norma de identificación y registro permitirá a la Administración autonómica disponer de censos "fiables", sobre los que planificar y establecer programas sanitarios preventivos o de urgencia.

   Además, la directora general añadió que servirá de acicate para evitar el abandono así como para mejorar su protección, posibilitar su recuperación en caso de pérdida o robo y depurar responsabilidades ante los casos de maltrato animal, producción de daños o incumplimiento de la legalidad.

   Los animales deberán portar debajo de su oreja izquierda con un microchip con un código alfanumérico implantado por un veterinario, que expedirá además un "pasaporte de desplazamientos" y registrará los datos del propietario y del propio animal en una base de datos, como paso previo a cualquier vacunación o acto sanitario.

   Los propietarios contarán con tres meses para identificar el animal desde su nacimiento y con un mes si la adquisición ha sido realizada en una tienda; y la Administración regional establecerá un periodo de 12 meses para que los afectados por el decreto se adapten al mismo.