Navalmoral de la Mata se ha convertido en un lugar en el que de vez en cuando se puede avistar un lince ibérico, una especie que está en peligro de extinción.

Hace sólo unos días, en las inmediaciones del Hospital Campo Arañuelo, se pudo grabar un ejemplar de esta raza paseando tranquilamente. Hay que recordar que este centro sanitario se encuentra a las afueras de la localidad, en las inmediaciones de una zona frondosa y con vegetación.

Isabel Cortés González, ha sido la ciudadana que ha conseguido captar desde una ventana del hospital estas imágenes, tal y como ha narrado a LA MAÑANA de Radio Interior.

Ella estaba en el hospital de Navalmoral de la Mata cuando pudo ver a este lince, en una zona en la que «cuando se pone el sol siempre hay movimiento de conejos, zorros y demás animales», pero quizá no pensó que podría avistar un lince ibérico.

Para su sorpresa, uno de estos días avistó un bonito ejemplar de lince ibérico que llegó a cruzar la valla acercándose así a las inmediaciones del hospital.

Ya se tenía el conocimiento de que había estos animales por la zona porque hay señales que  avisan de la presencia de linces, ya que algunos ejemplares de esta especie animal tienen en el cuello un geolocalizador. La señal la transmiten unos collares que se pondrán a los linces autóctonos o reintroducidos de la zona. Es decir, los receptores captarán la señal que emite en VHF el collar del animal cuando está cerca de la carretera.

Se trata de un panel informativo lumínico instalado en la vía que solo se activa cuando detecta la cercanía de alguno de estos animales dotados de un collar de seguimiento. El sistema capta la señal de muy alta frecuencia VHF (Very High Frequency) que emite el citado dispositivo alerta a los conductores de que deben moderar la velocidad, así como incrementar la precaución.

El aviso se mantiene encendido durante un tiempo prefijado (actualmente unos 15 min) y posteriormente se apaga un minuto. Si se sigue detectando presencia, se vuelve a encender. Estos equipos permanecen apagados en caso contrario, evitando así el efecto de “permanencia” y “cotidianeidad” que implica que los usuarios no presten atención a dicha señalización.

Al principio, Isabel se sorprendió y estaba emocionada ya que los movimientos del lince eran elegantes y debía de estar buscando alimentos. Este animal en todo momento estaba en buen estado. «Ha sido maravilloso poder contemplar a un lince desde tan cerca», añadió en el magacine de Radio Interior.

En la foto de la noticia, el lince visto por el casco urbano de Navalmoral de la Mata.