El PSOE ha expulsado a los cuatro concejales de Salvatierra de los Barros que presentaron su dimisión tras el escándalo provocado por el proyecto de levantar en el municipio un macrovertedero.
En una nota de prensa, el PSOE asegura que los 4 ediles han revertido su intención de dimitir y han anunciado su propósito de dar la alcaldía al PP. Como informó LA MAÑANA de Radio Interior, presionado por sus vecinos y por los propios concejales que formaron parte de su equipo de gobierno, el alcalde de Salvatierra de los Barros, Francisco José Saavedra, presentaba este sábado su dimisión en medio de la fuerte polémica suscitada por un proyecto para instalar un macrovertedero de residuos industriales en su término municipal.
Saavedra se ha desplazado desde su municipio a la sede provincial del PSOE en Badajoz y ha anunciado la renuncia a todos sus cargos tan solo una semana después de dejar «temporalmente» la alcaldía alegando problemas de salud y apenas dos meses después de que se originase la polémica por la construcción de un macrovertedero de residuos peligrosos promovido por la sociedad 3RS Gestión MA Extremadu
Así lo indica el PSOE de la provincia de Badajoz en una nota de prensa en la que lamenta que el PP pretenda hacerse con el ayuntamiento de Salvatierra «a cualquier precio y sin pasar por las urnas».
Así, los socialistas reprochan al PP que se «aproveche» de esta situación de «incertidumbre» para «alimentar, azuzar e incrementar la tensión» en el pueblo, con el «único objetivo de hacerse con el ayuntamiento a toda costa y a cualquier precio, y sin descartar métodos poco ortodoxos como la coacción y la amenaza», indica en una nota de prensa.
Los socialistas pacenses recuerdan que el presidente provincial del PP «reconoció haber llamado al alcalde para pedir su dimisión, algo inaudito entre partidos políticos».
De esta forma, prosigue el comunicado, el PP de Extremadura «roba un ayuntamiento al PSOE», que teme que esta «nueva metodología de arrebatar el poder sin pasar por las urnas se convierta en regla», por lo que estarán «muy atentos».
Según la secuencia que describen los socialistas, el anuncio del proyecto del macrovertedero se publicó en el DOE el miércoles 5 de octubre; unos días más tarde, el 10 de octubre, el alcalde Francisco José Saavedra anunció su oposición a dicho proyecto y se comprometió a presentar alegaciones. Ya el 24 de octubre, la Junta de Extremadura archiva el proyecto del macrovertedero, dejándolo administrativamente «muerto».
Una cronología de unos veinte días desde que se presentó el proyecto hasta su archivo; a partir de ese primer momento, el PP y militantes populares «llevan a cabo una campaña de difamación e injurias contra el alcalde de Salvatierra», que da como «primer fruto» la «agresión» sobre Saavedra el pasado 15 de octubre, lo que provoca en el alcalde «más inquietud e inestabilidad» que le lleva a solicitar su baja laboral.
A partir de ese momento, los concejales que formaban parte del gobierno anunciaron el 7 de noviembre su intención de dimitir si el alcalde no lo hacía, aportando como «única excusa la pérdida de confianza».
Desde entonces, se ha llevado a cabo una «campaña de desprestigio» contra el alcalde de Salvatierra, sin «ninguna investigación judicial abierta, sin ninguna denuncia llevada a cabo, sin ninguna apertura de expediente» por parte de la intervención del ayuntamiento. Un alcalde que fue elegido democráticamente y que «también democráticamente defendió un proyecto para después corregir legítimamente su postura».
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