Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Puesto de Cañamero, de la Comandancia de Cáceres, han procedido al recate de un perro, de raza mastín, el cual se encontraba en un agujero, atrapado con una malla, con síntomas de debilidad y deshidratación, tras haber caído desde un talud, a dos metros de altura.
Una patrulla de Cañamero se ha desplazado hasta una finca de la localidad tras recibir una llamada de emergencia en la Central Operativa de Servicios de la Comandancia indicando que un perro de grandes dimensiones había sufrido una caída, encontrándose atrapado por una malla y no siendo posible su extracción por las personas que se encontraban en el lugar.
Una vez en la finca, los agentes se entrevistan con las personas que allí se encontraban, indicando que el perro es de raza mastín y no es propiedad de ninguno de ellos, debiendo pertenecer al propietario de alguna finca colindante, puesto que lleva collar y aparenta estar bien cuidado, con un peso de unos 60 kilogramos.
El animal ha caído de un talud de unos dos metros de altura, quedando atrapado por una malla metálica y una hilera de troncos, lo que impedía su extracción. Tras varios intentos infructuosos para intentar sacarlo, los agentes cortan parte de la malla que dificultaba el acceso hasta donde se encontraba el animal, pudiendo así agarrarlo hacia una parte del terreno más accesible, desde donde procedieron a su extracción.
Los agentes, tras atender al animal con agua y comida, localizaron al propietario del mismo, quien manifestó que llevaba varias horas buscándolo, haciéndose cargo del mismo.
