Como si de un presagio se tratara, un año después de que perdiera la vida la primera víctima del Covid-19 en Extremadura, parece que todo vuelve a empezar. El miércoles Extremadura dejó de ser la comunidad autónoma con la menor incidencia acumulada de contagios de Covid-19 a los 7 días y había dos regiones con mejores resultados.

Este jueves, la tasa de contagios a los 14 días era de 43,83 casos activos por 100.000 habitantes y la región se encontraba muy por debajo de la media nacional, que se situaba en 132,25. Por lo que respecta a la incidencia a los 7 días los datos arrojaban 22,95 positivos por 100.000 habitantes, también por debajo de la media nacional, que era de 60,10. Desde el inicio de semana se ha ido apreciando un ligero repunte en el número de casos activos que ha ido creciendo numéricamente día a día y que ha sido corroborado por la incidencia a los 7 días, que tiene especial importancia porque pone de manifiesto la tendencia de los contagios más recientes. El lunes y el martes se mantuvo en 20,98 positivos por cada 100.000 habitantes, el miércoles creció hasta una tasa de 22,38 y ahora está en 22,95. En términos numéricos, los casos activos han ido creciendo desde el principio de la semana en una progresión hasta ahora imparable: 14 nuevos positivos el lunes, 41 el martes, 55 el miércoles y 63 el jueves.

Lo mismo ha sucedido con la cifra de fallecidos; la pasada semana se registraron 6 muertes por Covid-19 en Extremadura y ese número ya se ha igualado desde el pasado lunes y aún faltan tres días para el domingo. El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha vuelto a advertir en la Asamblea de Extremadura que esto no ha acabado y que las nuevas variantes del coronavirus son una auténtica amenaza. La británica ya representa más del 65 por ciento del total de contagios en la región y tiende a expandirse con todo lo que ello implica, una mayor gravedad de la enfermedad y una mayor tasa de mortalidad. Vergeles también ha informado que los análisis realizados en las aguas residuales pronostican un incremento del número de contagios.

En las últimas 24 horas se han notificado 63 casos positivos de Covid-19 en la región y se han producido dos decesos, uno en el área de salud de Mérida, donde ha perdido la vida una mujer de 88 años de Calamonte, y otro en el de Plasencia, donde ha muerto un hombre de 67 años de Jaraíz de la Vera. Lo mejor de los datos es que la presión hospitalario continúa estabilizada; el miércoles había 42 pacientes ingresados por Covid-19 de los que 11 estaban en la UCI, y este jueves la cifra de hospitalizados era de 43 con 10 en cuidados intensivos.

Cuando el 11 de marzo de 2020 murió la primera persona por coronavirus en Extremadura -una mujer de 59 años de Arroyo de la Luz- nadie preveía que 365 días después iba a tener sobre la mesa la cifra de 1.715 fallecidos por Covid-19, es decir, una media de 4,7 muertes diarias. El triste ránking de víctimas lo encabeza el área de salud de Cáceres -460-, seguido del de Badajoz, con 309; el área de Mérida, con 231 y el de Don Benito-Villanueva de la Serena, con 219. Les siguen las zonas de Plasencia, con 188 muertes por Covid-19; Llerena-Zafra con 119; Navalmoral de la Mata con 108 y Coria con 81.