La comunidad autónoma de Extremadura se encuentra atravesando en estos momentos la fase más dura de la Covid-19 desde el inicio de la crisis sanitaria con una incidencia acumulada de casos muy por encima de la media nacional, según ha reconocido el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles.
«Estamos quizás en la peor situación desde el inicio de la pandemia», ha dicho el vicepresidente segundo del Gobierno regional en una comparecencia ante los medios de comunicación tras la celebración del Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura.
Vergeles ha reconocido también que en los últimos días las cifras de incidencias acumuladas de contagios son muy altas tanto a los 14 como a los 7 días, que han hecho que la región alcance récords de contagios. Actualmente la incidencia acumulada a los 14 días es de 716,58 casos, mientras que la media española se sitúa en 321,01 contagiados por cada 100.000 habitantes.
Pero lo peor de todo es que las previsiones apuntan a que la tendencia continúe al alza, ya que la incidencia a los 7 días en Extremadura es de 419,96 casos activos por cada 100.000 habitantes frente a la media del país, que es de 161,64. El consejero de Sanidad considera, sin embargo, que la presión asistencial está bien, probablemente por la detección rápida y por la labor de los profesionales sanitarios en el control de la pandemia.
Según los datos de la Junta de Extremadura, en estos momentos la ocupación de camas por enfermos de Covid está en torno 11,9 por ciento en la región, un porcentaje muy similar al de la media del país. Por lo que respecta a las camas UCI ocupadas por pacientes con coronavirus, las cifras en Extremadura se encuentran «bastante por debajo de la media nacional», según Vergeles; en la región el porcentaje de ocupación es de un 18 por ciento frente al 24 por ciento de la media del país.
A pesar de todo el consejero ha advertido que la ocupación hospitalaria va a continuar subiendo y ha insistido en la necesidad de reducir la movilidad al máximo posible porque, según ha dicho, ha quedado demostrado que influye de forma decisiva en la transmisión de la enfermedad.
«En cuanto haya algo de luz podremos levantar las medidas tan duras y restrictivas» adoptadas por el Consejo de Gobierno, ha tratado de tranquilizar el vicepresidente segundo de la Junta de Extremadura. Para evitar la propagación de la enfermedad, el Servicio Extremeño de Salud (SES) ha incrementado de manera importante la realización de pruebas para la detección de la Covid-19. Sólo en la jornada del jueves se hicieron 6.181 pruebas diagnósticas entre PCR y test de antígenos en un esfuerzo por detectar nuevos contagios. Desde el día 4 de enero se han llegado a realizar 4.252 pruebas.
