ISABEL BARRANTES
El tradicional nacimiento que cada año ponen en marcha en Moraleja el empresario Manuel Cayuela y su mujer, Ana María Zanca, vuelve a ser uno de los principales atractivos de la Navidad para disfrute de vecinos y visitantes que se acerquen hasta la Casa Toril.
Concretamente este belén cuenta con más de 600 piezas entre figuras humanas y animales, además de diferentes construcciones, a través de las cuales se representan escenas como la Adoración al Niño Jesús, recreaciones de distintas épocas y también algunas escenas de la Biblia.
Cada año el nacimiento incluye novedades en la representación. Este año la familia Cayuela se ha decantado por hacer un guiño a la Sierra de Gata incluyendo la escena de un olivar.
Además hay otros espacios llamativos e inéditos como es el caso de una escuela y de unos portales donde pueden presenciarse cuatro oficios tradicionales, entre los que se encuentra el alfarero y el zapatero.
Asimismo, los organizadores han trabajado en la restauración del pesebre añadiéndole paredes y tejado y han procedido a mejorar la pintura. La sección dedicada a Egipto se amplía con más elementos decorativos y con la figura de la huida.
Además, el belén cuenta con una hucha solidaria para recaudar fondos que están destinados a la Asociación Oncológica de Extremadura.
