LUCÍA SEMEDO 

 

La presidenta de Diputación de Cáceres, Rosario Cordero, ha reiterado la importancia de una sanidad especializada en el tratamiento de salud de las mujeres inmigrantes. La presidenta ha emitido estas declaraciones en el marco de la inauguración de las Jornadas de Salud para las mujeres inmigrantes de Extremadura, dentro del proyecto HYGÍA, que ha organizado la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura (ADHEX), y que se han celebrado este miércoles en la Casa de la Mujer de Cáceres.

   En su intervención, Rosario Cordero ha señalado que la religión, la cultura, la lengua y la situación personal son solo algunos de los aspectos que hay que tener muy en cuenta a la hora de atender socio-sanitariamente a una persona, y si a esto se añade el hecho de ser mujer se requerirá una atención más especial aún.

   A su juicio, “la salud solo se puede enfocar desde la perspectiva de género, debido a la necesidad de entender los procesos de salud, en sentido amplio, y la enfermedad en estrecha relación con aspectos como el sometimiento o el control que se ejerce sobre las mujeres”.

   Por otro lado, el hecho de ser inmigrante refuerza, dice, su convencimiento de este tratamiento específico, ya que “hay mujeres inmigrantes provenientes de culturas donde le patriarcado está mucho más arraigado, otras con creencias religiosas que refuerzan el sometimiento al hombre o las que llegan víctimas de la trata de seres humanos”. Situaciones todas ellas donde se intensifican las desigualdades.

   Las principales dificultades con las que se encuentran las mujeres inmigrantes, según la presidenta de la Diputación, pueden ser el aspecto de la comunicación, tanto por la diferencia lingüística como por aspectos culturales o religiosos, u otras dificultades más específicas como la mutación genital femenina, la violencia de género o la ansiedad depresiva producida por el proceso migratorio “y el temor a no recuperar lo que se ha dejado”.

   Precisamente, a lo largo de las jornadas se han abordado temas como la mutilación genital, la trata de mujeres con fines de explotación sexual o la violencia de género en mujeres inmigrantes.