Panacex, la Asociación Patrimonio Natural y Cultural de Extremadura, ha denunciado ante la Unión Europea que el Gobierno de Extremadura no ha sometido a Evaluación Ambiental Estratégica la incidencia de los proyectos eólicos.

El colectivo ha remitido una carta a la Comisión Europea en la que alerta de que "la normativa comunitaria transgredida es la Directiva 2001/42/CE de la Unión Europea, con fecha 27 de junio de 2001, relativa a la evaluación de los efectos de determinados planes y programas sobre el medio ambiente". Según la asociación, esta directiva fue incorporada al derecho español a través de la Ley 9/2006 del 28 de abril 2006.

En su carta, la asociación cita además un informe de la Sociedad Española de Ornitología, SEO/BirdLife, en el que señala que la ausencia en España de una Evaluación Ambiental Estratégica de planes y programas de energía eólica "ha propiciado que la rápida proliferación de parques eólicos que se ha dado en nuestro país se haya producido en muchas ocasiones sin una adecuada planificación y seguimiento", lo que ha provocado "un incremento de los efectos negativos que normalmente provocan".

Por otra parte, en lo que se refiere al plan eólico de Extremadura, Panacex señala que el panorama es "desolador", ya que según los datos que aporta de la Sociedad Española de Ornitología, de los 116 proyectos propuestos, 16 tenían parte de su polígono de actuaciones dentro de alguna Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y 11 dentro de algún Lugar de Interés Comunitario (LIC). Además, 82 proyectos se encontraban a menos de 10 kilómetros de espacios de la Red Natura 2000 declarados para aves o murciélagos, y que por lo tanto pueden afectar a sus valores y a la integridad y coherencia de la Red.

El presidente de Panacex, Ramón Rodríguez Viñals, alerta de que con los proyectos aprobados y en estudio, "se puede hipotecar gravemente el futuro turístico y cinegético de gran parte del territorio extremeño", ya que según explica, "se destruirán y convertirán en zonas semi-industriales, bellísismos paisajes y espacios naturales fuente de una industria mucho más ecológica y rentable que la energía eólica".