El Ayuntamiento de Gata, del que depende la entidad de La Moheda de Gata, baraja la posibilidad de cerrar definitivamente las piscinas municipales este verano ante el segundo sabotaje en los últimos diez días que ha sufrido el recinto deportivo. Así lo ha aseguro el alcalde de Gata, Miguel Ángel García, que ayer se desplazó a La Moheda para analizar la situación.
El nuevo acto de vandalismo tuvo lugar en la madrugada de ayer miércoles y fue similar al ocurrido en la madrugada del domingo día 10 de julio cuando una o varias personas entraron en el recinto y vertieron aceite industrial en el agua de la piscina. En aquella ocasión fue necesario cerrar la piscina durante cinco días y este pasado fin de semana se volvió a abrir a los bañistas con entrada gratuita para todos.
Ante este nuevo vertido, García ha expresado su indignación y también temor de que estos vándalos puedan continuar saboteando las piscinas durante todo el verano.
El ayuntamiento ha presentado ya dos denuncias en el cuartel de la Guardia Civil de Moraleja y aunque los agentes han estado investigando y vigilando la zona de momento no se ha encontrado ninguna pista, ante el malestar y preocupación de los vecinos. Por ello el alcalde ha pedido la colaboración ciudadana por si algún vecino ha visto o escuchado algo en los últimos días.
Tras el primer vertido, se fue retirando poco a poco el aceite y realizando las diferentes analíticas para garantizar la salubridad del agua y la salud de los bañistas.
El consistorio está estudiando varias soluciones: establecer vigilancias nocturnas, aumentar el perímetro de las vallas de acceso a la piscina y la más drástica, cerrar las piscinas de manera definitiva.
