La Junta de Extremadura ha vuelto a realizar un llamamiento a la precaución al volante y al respeto a toda la señalización viaria de la carretera autonómica EX-107, Badajoz-Olivenza, que en las últimas semanas ha presentado una alta accidentalidad.

La infraestructura es una carretera convencional que tiene una sección 7/10 y su velocidad está limitada a 100 km/h, además, está "correctamente" señalizada y balizada y el firme está en "buen estado".

La Intensidad Media Diaria (IMD) de circulación, de acuerdo con el Plan de Aforos del año 2009, está en 8.882 vehículos/ día con un 4,5 % de pesados en la entrada en Badajoz y de 8.065 con un 4,6 % de pesados en la entrada en Olivenza. Se trata de una carretera con una elevada IMD en todo su recorrido siendo una de las más altas de Extremadura, ha apuntado el Ejecutivo regional en nota de prensa.

La Administración regional ya llevó acabo un Estudio de Seguridad Vial en 2009, en el que se detectó un tramo de concentración de accidentes (TCA) entre los pk 7,100 y 8,500. Una vez delimitado este tramo, se procedió a su señalización y a la redacción del oportuno proyecto de actuaciones -actualmente en fase de licitación y con previsión de adjudicar antes de que acabe el año- para comenzar las obras inmediatamente después. El objetivo de este proyecto para eliminar el TCA es concentrar accesos en dos vías de servicio para reducir el número de entradas directas a la carretera.

Además, tal y como ha indicado la Junta, del estudio de los accidentes registrados, no se deduce que la causa sea el estado de la infraestructura, sino que se deben a circunstancias relacionadas con la conducción como el exceso de velocidad, distracción del conductor, adelantamientos indebidos y salidas o entradas a los accesos con maniobras inapropiadas o falta del cinturón de seguridad en el conductor.

Pese a ello, y dentro de su programa de seguridad vial, la Administración autonómica va a profundizar en el estudio de la accidentalidad de esta carretera para comprobar si se detectan nuevos Tramos de Concentración de Accidentes en otros puntos y actuar sobre ellos.

Según este exhaustivo estudio, y si los resultados así lo aconsejan, se procedería a reforzar la señalización en los tramos más conflictivos mediante señales de alta reflectividad que adviertan a los conductores de su peligrosidad derivada del alto número de accesos existentes.

Pero, independientemente de las acciones que la Junta de Extremadura pueda adoptar para mejorar más si cabe la seguridad vial, es "imprescindible" que los conductores pongan su atención en la conducción y cumplan rigurosamente las normas de circulación, no superando la velocidad máxima autorizada, respetando y cumpliendo lo establecido en la señalización tanto vertical como horizontal, manteniendo atención en la conducción y no conduciendo bajo los efectos del alcohol o de otras sustancias que modifiquen el comportamiento o afecten a las condiciones físicas del conductor.

Por último, la Junta de Extremadura recuerda que la futura conversión de esta carretera en autovía está contemplada en el Plan de Infraestructuras Viarias de Extremadura (2008-2015), que se ejecutará en función de las disponibilidades presupuestarias.