El hermanamiento entre Cuenca y Plasencia ha ampliado las relaciones fraternales entre ambas ciudades. Tras la rúbrica oficializada durante la celebración del Martes Mayor, ahora le toca el turno a la capital del Jerte. Así, la alcaldesa de Plasencia, Elia María Blanco, acompañada de la concejala de Turismo, Raquel Puertas, acudirán a la ciudad conquense este domingo, 19 de septiembre, para ratificar el acuerdo de hermanamiento.

Actos programados

En esta ocasión, la ratificación coincide con la celebración de las fiestas populares de San Mateo en la ciudad castellana y que darán comienzo este sábado, día 18 de septiembre.

Por su parte, la Alcaldesa de Plasencia viajará a Cuenca el Domingo, día 19 de septiembre, acompaña por la edil de Turismo, Raquel Puertas.

En el marco del programa de actos, durante esta jornada está previsto que el placentino afincado en cuenca, Jesús J. Torres Arroyo, presente su libro "Historias de la muy Noble, Benéfica, Leal y Bella Ciudad de Plasencia en la Historia de España". Será a las 21.00 horas en el Parador Nacional de la ciudad y estará arropado por el alcalde de Cuenca, Francisco Javier el Pulidos y parte de la corporación municipal.

La ratificación del hermanamiento se producirá al día siguiente lunes, día 20 de septiembre, a las 11.00 horas, en el salón de plenos del ayuntamiento de Cuenca. Se repetirá la misma formalidad: recepción oficial, ceremonia con la lectura de hermanamiento, rubrica y el discurso de ambos alcaldes.

Los lazos comunes

Como ya se hiciera visible en el mes de agosto, los lazos comunes entre la ciudad castellana y extremeña son ciertamente ilustres teniendo en cuenta que el fuero de Plasencia pertenece a la 'familia de fueros de Cuenca', según la denominación de los historiadores. En ambos casos les fueron dados por el Rey Alfonso VIII. El de Cuenca en 1189, 12 años después de ser tomada a los almohades; el de Plasencia, se cree que data de 1.196, siete años después de la fundación por el mismo rey.

Además, en su origen, las dos ciudades tiene características similares, al otorgárseles amplios territorios para repoblar; las dos son ciudades de realengo y libres desde su nacimiento por lo que solo debían lealtad al rey; además, ambas se erigen en cabeceras de importantes comarcas.

Otras coincidencias, como se puso de manifiesto durante la ceremonia del hermanamiento en Plasencia,  vienen dadas por el hecho de que las catedrales de ambas están consagradas a Santa María y porque tienen monumentos que rememoran al rey fundador así como calles y hoteles homónimos. La similitudes se completan con las coincidencias de los nombres diversas iglesias.

Es el caso de las de San Martín, San Nicolás, San Pedro, El Salvador (desaparecida en Cuenca)) o la ermita de San Antón (desaparecida en Plasencia) y el convento de la Merced. Como sedes episcopales, las dos ciudades cuentan con palacio episcopal y tienen parador de turismo.

Asimismo, las dos tienen los títulos de muy noble y muy leal. Cuenca también está integrada en la Red de Ciudades Catedralicias, cuya creación promueve e impulsa Plasencia, ciudad en la que se constituyó la pasada primavera.