Uno de los mansos que ha participado este mediodía en el encierro del toro de la ganadería de Eduardo Miura ha provocado un herido de caracter grave. Se trata de un vecino de Coria que presenta una cornada en tercio superior en la cara interna del muslo izquierdo con afectación vascular y fuerte hemorragia.

El corredor han entrado en estado de shok en la enfermería aunque afortunadamente se le ha podido estabilizar y posteriormente se ha trasladado al Hospital Ciudad de Coria donde ha sido sometido a una intervención quirúrgica. El pronóstico del corredor es grave.

Según algunos testigos presenciales, la cogida se ha producido en la plaza de España cuando Ladrillero, el astado de Miura, entraba en el toril, por lo que la mayoría del público estaba pendiente del toro, en ese momento uno de los bueyes ha corneado a este vecino de Coria que estaba próximo a los barrotes en la zona de sol de la plaza. En el lugar de los hechos y también en el recorrido hasta la enfermería ha quedado un importante rastro de sangre ya que ha sido una herida con afectación vascular y con una importante hemorragia.

Por otra parte, el encierro ha sido también muy tenso durante su recorrido. El Miura ha cumplido con la expectación generada y se ha dado la vuelta durante el encierro, ha corneado a varios mansos y ha doblado los barrotes.

En lo que se refiere al estado de salud del joven de 33 años herido esta madrugada en la lidia de Ricacho ha sido trasladado hasta el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres. En principio se había programado una operación en el centro hospitalario de Coria pero los sanitarios han decidido derivarlo a Badajoz donde será tratado de la cornada que presenta en el cuello y del puntazo del abdomen.