La actuación de un policía local de Villanueva evitó una tragedia durante el encierro de las vaquillas de Santiago y Santa Ana. El suceso ocurrió cuando un joven de 17 años resbaló de una valla y se golpeó la cabeza, sufriendo una conmoción, que le mantuvo inconsciente varios minutos. El agente le auxilió colocando la lengua del joven en su lugar porque le obstruía el conducto respiratorio. El adolescente sólo fue atendido por una brecha en la cabeza. Este fue el incidente más destacado de las fiestas. También hubo rencillas sin consecuencias en las casetas y el botellón, informó Pedro Calderón, jefe de la policía local, que destacó la colaboración de la Policía Nacional y la Guardia Civil.