Las familias extremeñas llegan a pagar más impuestos que las de cualquier otra comunidad autónoma a pesar de que el nivel medio de rentas en Extremadura es el más bajo del país.

 Un estudio comparativo realizado por el Consejo General del Colegio de Economistas de España pone de manifiesto que la presión fiscal en la región es mayor que en cualquier otro punto del Estado, una situación a la que se ha llegado por las distintas políticas de reducción fiscal que han llevado a cabo los Gobiernos autonómicos.

En el caso de la Junta de Extremadura, a tenor de este trabajo, es uno de los ejecutivos que menor número de exenciones a introducido en los tributos sobre la renta, el patrimonio, las donaciones y las sucesiones, por ejemplo, informa El Periódico Extremadura.

El Consejo General del Colegio de Economistas ha comparado estos cuatro impuesto, que comparten todas las regiones, para analizar las diferencias entre los territorios. Solo han quedado fuera País Vasco y Navarra, que poseen un régimen fiscal particular. En el caso del resto de comunidades, se pueden observar grandes diferencias tanto en la carga impositiva que deben asumir las familias –lo que pagan a Hacienda– como en las exenciones que se practican.

Para ello, en el estudio se ha aplicado un modelo concreto de familia para cada tributo y se han fijado las cláusulas en vigor en cada territorio. Así, Extremadura aparece como la comunidad autónoma donde un matrimonio paga más a Hacienda por el Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas (IRFP) y en el de Donaciones, y está entre las más caras en los tributos sobre Patrimonio y sobre Sucesiones.

 

IRPF: 1.000 euros más que Valencia o Madrid

A la hora de hacer la comparativa sobre la renta, los técnicos del REAF –el departamento de asuntos fiscales del Consejo de Economistas de España– han tomado como referencia una familia compuesta por dos adultos –casados en régimen de bienes gananciales–, con una hija de cuatro años y un hijo de ocho meses. Entre los dos progenitores, ambos con trabajo, ingresan 42.000 euros anuales. Así, teniendo en cuenta que son propietarios de una vivienda por la que han pagado este año 6.000 euros en concepto de hipoteca, y que utilizan guardería, este matrimonio pagaría a Hacienda en Extremadura 3.229 euros al año en concepto de renta, incluyendo las retenciones mensuales en sus nóminas y las exenciones aplicables en la región una vez resuelta la declaración de la renta –ya sea a pagar o devolver–. Esa misma familia tendría que pagar lo mismo en Asturias o en Aragón, pero se ahorraría dinero en el resto de comunidades autónomas: en Cataluña, por ejemplo, pagarían 400 euros menos; en Madrid se ahorrarían hasta 800 euros y en la Comunidad Valenciana, casi 1.000 euros.

¿A qué se deben estas diferencias? La clave está en las exenciones que se aplican en cada territorio. Así, mientras en Extremadura hay desgravaciones por el cuidado de familiares con discapacidad, por acogimiento familiar de menores, por la adquisición de vivienda nueva de protección pública para jóvenes o por alquiler de pisos, en otras regiones se realizan además deducciones por el nacimiento de hijos, por ser familia numerosa, por la atención a personas mayores o incluso por la adquisición de libros de texto o el gasto en guardería.

En este sentido, Canarias y Valencia son las comunidades que más cláusulas de exención han legislado sobre este impuesto, que es de ámbito nacional pero sobre el que tienen ciertas competencias las autonomías. En estos dos casos, cada una cuenta con 17 situaciones que permiten desgravar en la declaración de la renta.