La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha recibido en la sede de Presidencia del Gobierno regional a un grupo de 18 niños procedente de los campos de refugiados de Tinduf (Argelia) que han pasado los meses estivales con familias de acogida de diferentes puntos de la región dentro del programa ‘Vacaciones en Paz’ impulsado desde 1995 por la Federación de Asociaciones de Amigos y Amigas del Pueblo Saharaui de Extremadura (FEDESAEX).

Guardiola ha destacado que estos menores -en total un centenar de entre 8 y 10 años-, «vuelven a casa con una mochila cargada de experiencias, cargada de aventuras, cargada -sobre todo- de mucho de cariño» y ha agradecido a las familias extremeñas de acogida su compromiso, solidaridad y generosidad, «por darle tanto amor a estos niños, por atender sus necesidades médicas».

La responsable del Ejecutivo regional ha dedicado unas palabras a Ahmed, «un niño de nueve años que ha venido por primera vez a conocer a sus abuelos de Villanueva de la Serena», sobre los que ha explicado que se consideran sus abuelos extremeños porque «recibían verano tras verano a su mamá y ahora han podido conocer a Ahmed».

En esta línea, ha añadido que ‘Vacaciones en Paz’ es «un programa que va a más allá de unas simples vacaciones, es un programa donde se generan unos lazos que son irrompibles».

Con respecto a la situación de los campos de refugiados de Tinduf, en pleno desierto del Sáhara, donde residen más de 170.000 personas, María Guardiola ha pedido a los extremeños que hagan «un ejercicio importante de solidaridad para atender a estas poblaciones que no tienen recursos y cuyo progreso depende principalmente de la ayuda humanitaria».

Sin embargo, ha dicho que, a pesar de las condiciones adversas, «estos niños tienen mucho que enseñarnos» porque, ha apuntado, «como nos han contado las familiares, regalan cosas que no se pueden pagar con dinero».

María Guardiola ha agradecido a los niños saharauis su estancia en Extremadura, «por ser tan valientes al participar en este programa a miles de kilómetros de su casa, de sus familias», a los que ha despedido diciendo que «se llevan un trocito de nuestro corazón y un trocito de nuestra tierra que, por supuesto, también es suya».

A preguntas de los periodistas sobre el compromiso de Extremadura con los campos de refugiados de Tinduf, la presidenta ha mostrado su total disposición a seguir colaborando con la Federación de Asociaciones de Amigos y Amigas del Pueblo Saharaui de Extremadura (FEDESAEX).

En este sentido, ha anunciado, «vamos a poner a la Agencia Extremeña de Cooperación para el Desarrollo a su disposición; vamos a agilizar todos los procesos, que muchas veces son tediosos y lentos; y vamos a poner a su disposición el Servicio Extremeño de Salud, para que haya convenios en programas donde no los hay y se pueda atender a los niños y a los jóvenes».

En la foto de la noticia, grupo de 18 niños procedente de los campos de refugiados de Tinduf (Argelia).