Decenas de personas protestaron anoche a las puertas del Centro de Salud de La Mejostilla de Cáceres tras comprobar cómo cerraban las puertas sin poder realizarse una prueba contra la Covid-19.
Los vecinos acudieron al centro respondiendo a la llamada realizada por las autoridades sanitarias para un cribado masivo que permitiese detectar el coronavirus. Unos expresaron su malestar con escritos en las redes sociales, otros optaron por permanecer a las puertas del centro como medida de presión y otros corearon gritos de protesta e incluso insultos contra el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles.
«He estado casi 3 horas para hacerme un test de antígenos en el Centro de Salud de Mejostilla y al final la Policía nos ha tenido que disolver porque han cerrado o se han terminado los test (las dos excusas decían); alguien debería dimitir y volver al sistema Auto-Covid, que funcionaba bien y sin riesgos para nadie», manifestó en su perfil de Facebook José Carlos Bote.
Otra vecina, de nombre Gema, con una discapacidad del 58 por ciento, se quedó a dos puertas del acceso. Cuando se disponía a entrar la Policía Local bloqueó las puertas. LLevaba esperando desde las 15.00 horas.
«Fue indignante, cuatro colas, en un principio no había policía, ni vallas, sino que la gente se encontraba mal distribuida hasta que llegaron los agentes», ha dicho esta mañana a Radio Interior. Fue entonces cuando se reorganizó al público en dos filas, pero la cola llegaba hasta la rotonda del Mercadona.
Otro vecino, Juan Carlos Caso, vecino del Consejo de Distrito Norte, asegura que fue «una desorganización absoluta». «No se puede poner a solo tres personas cuando se intuía que iba a ser un cribado masivo», ha indicado este jueves.
La polémica se ha extendido a las redes sociales con comentarios distintos sobre lo sucedido. En Facebook se ha convertido en uno de los asuntos más comentados y el que ha generado mayor número de reacciones. Mientras los asistentes al cribado critican lo sucedido, otros usuarios de la red lamentan que se dirigieran insultos contra los sanitarios que «han pasado de héroes a villanos».
En este sentido Juan Carlos Caso ha aclarado que ninguno de los allí presentes protestó contra los sanitarios que estaban realizando las pruebas, sino contra Vergeles y la Junta de Extremadura por haber limitado los recursos humanos tras haber hecho una convocatoria de cribado masivo.
«La gente no protestaba contra el personal sanitario que estaba allí, sino contra la Consejería de Sanidad y la Junta de Extremadura», ha aclarado.
Hoy continuará el cribado, pero ya hay unas vallas y se aprecia mayor organización. Los usuarios que van a volver a asistir confían en que haya dos colas y una de ellas tenga carácter preferente para las personas con discapacidad. Y esperan que haya más de tres sanitarios para poder atender a todos los que asistan.