Los familiares de usuarios de la Residencia de Mayores «El Cuartillo» de Cáceres, conocida como la Asistida, han presentado este jueves ante los Juzgados de Cáceres una querella criminal contra la dirección del centro por la presunta gestión negligente realizada durante la pandemia en este centro público, en el que perdieron la vida 76 personas como consecuencia del coronavirus.

Las actuaciones judiciales se dirigen contra la directora de este centro de mayores, a la que acusan de la presunta comisión de los delitos de homicidio por imprudencia y lesiones por imprudencia, según ha explicado el despacho de abogados Pita & Broncano, que presentó la querella de forma telemática.

Los familiares de las víctimas aseguran que el centro ha sido uno de los más afectados de España durante la crisis sanitaria y advierten sobre la posibilidad de añadir nuevos delitos a medida se vayan desarrollando las actuaciones judiciales. En el mismo sentido han indicado que no se descarta solicitar responsabilidades a la Junta de Extremadura por tratarse de un centro de titularidad pública gestionado por el SEPAD. Los familiares también han solicitado que la Fiscalía dé traslado de las diligencias de investigación abiertas por la Fiscalía Provincial en otra actuación en el mismo sentido y referida también a la gestión realizada en esta residencia de mayores.

«El Cuartillo» es un centro con capacidad para 320 residentes en el que, según cifras oficiales, perdieron la vida 76 mayores, si bien los familiares estiman que podría haberse producido un centenar de defunciones como consecuencia de la Covid-19. Uno de los hechos negligentes relatado es que los trabajadores fueron obligados por la dirección a prescindir de la mascarilla durante los primeros días de la pandemia para no generar alarma entre los residentes.

La querella recoge los testimonios de los familiares que indican que en las videollamadas realizadas a los familiares se podía comprobar como en pleno confinamiento, y estando vigente el estado de alarma, estaban todos los residentes juntos en zonas comunes, y no en sus respectivas habitaciones.

También denuncian la falta de control existente en la residencia, ya que en una misma jornada el personal del centro les comunicaba que sus familiares se encontraba bien y por la noche, sin embargo, les comunicaban su fallecimiento. Asimismo se dio la circunstancia de que comunicaron la muerte de algunos residentes a sus familias y posteriormente se vieron obligados a telefonear para indicarles que se había tratado de un error. El relato de los hechos sostiene que algunos residentes contagiados eran aislados en un pasillo, cuando el protocolo obligaba a tener a cada uno en su habitación.

Con la presentación de esta querella, que en los próximos días podría ser admitida a trámite, los familiares esperan conocer «la verdad de la gestión que se ha llevado a cabo en el centro durante la pandemia». Por el momento se ha presentado la querella que afecta a 25 víctimas de la residencia para no demorar más la fecha de presentación. En el momento que el resto de familiares de las víctimas reúna la documentación necesaria se irán sumando a las diligencias, ya que hay aproximadamente 40 familiares a la espera de formular denuncia.