La Junta de Extremadura pretende rehabilitar minas antiguas y abrirlas a los visitantes para intentar dinamizar la economía regional, un ejemplo que ya se ha puesto en marcha en otras comunidades autónomas con notable éxito.

La consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, ha dicho este viernes que el Monumento Natural Mina La Jayona es “un buen ejemplo de patrimonio natural que mantiene una estrecha relación con el sistema económico y con el bienestar humano, que se ha desarrollado de manera armónica con el entorno”.

Las obras de adecuación realizadas en el Monumento Natural La Jayona permitirán la visita del nivel 3, recuperando la antigua pasarela aérea y mejorando las condiciones de seguridad de este paso. Esto supone nuevas expectativas para aprovechar el potencial que alberga en su interior, visitar las entrañas de la montaña y, al mismo tiempo, disfrutar del magnífico entorno natural que le rodea.

También se ha instalado una nueva iluminación en el nivel 2 de la mina, mejorando notablemente el interés de la visita, que ahora se ve complementada con el Museo Minero, de forma que Fuente del Arco incrementa de forma significativa y sostenible su oferta cultural y turística.

“Es importante la contribución activa del patrimonio natural y de la dimensión ambiental, en general, al desarrollo del territorio, en los tiempos actuales en los que “todo está interconectado”, ha señalado.

En su intervención durante la inauguración de las obras de adecuación y mejora realizadas en La Jayona, la consejera ha incidido en el binomio naturaleza y medio ambiente como factores estratégicos de desarrollo, trasladable a cualquier esfera pública, ya que considera que el crecimiento económico y la sostenibilidad van unidos de la mano, y que ambos son “posibles y compatibles”.

La titular para la Transición Ecológica y Sostenibilidad ha recordado la “gran tradición minera” de Extremadura, que puede y debe ser rehabilitada y puesta en valor como estímulo de dinamización económica.

“Estoy convencida de que el beneficio de la revalorización del patrimonio natural y, en este caso minero, debe ser la generación de riqueza económica social y cultural, en definitiva, el desarrollo local”.

También, ha solicitado la implicación de la iniciativa privada, del emprendimiento de servicios en torno a estos recursos naturales y culturales, ya que el reto demográfico exige a todos un esfuerzo añadido para mantener el dinamismo de los pueblos extremeños.

Comunidades autónomas como Asturias han revitalizado su patrimonio minero mediante la transformación de viejas minas y pozos de extracción en museos que reciben cada año la visita de miles de personas. Buen ejemplo de ello lo encontramos en Pozo Sotón, una antigua mina de extracción de hulla en el municipio de San Martín del Rey Aurelio que alberga el Centro de Experiencias y Memoria de la minería. El pozo es visitable y sus galerías subterráneas permiten a los turistas convertirse en mineros por un día ejerciendo la misma labor que en su tiempo desarrollaron los hombres que trabajaban bajo tierra a cientos de metros de profundidad.