La Junta de Extremadura ha establecido como obligatorio el uso de la mascarilla ante la relajación de la ciudadanía con las medidas de aislamiento y distanciamiento social, así lo ha asegurado el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles.

Esta nueva medida será obligatoria desde las 00.00 horas de este sábado en toda la comunidad autónoma y afectará a todas las personas mayores de 6 años que no tengan ninguna causa de excepcionalidad recogida en la normativa del uso de estos productos.

El uso será obligatorio en la vía pública, espacios al aire libre, espacios cerrados de uso público o que se encuentre abierto al público con independencia de si se mantiene o no la distancia de seguridad. La medida entrará en vigor a las 00.00 horas de este sábado.

Asimismo, ha asegurado que “será obligatorio en cualquier municipio, independientemente de si tiene brotes epidemiológicos o no. Hay que estar alerta para que no nos contagiemos porque el virus sigue con nosotros”.

Vergeles ha destacado el relajamiento en el uso de mascarillas sanitarias lo que ha dado lugar a cuatro brotes epidemiológicos en la región. “Todos los brotes tienen un nexo común, la mayoría se están produciendo por el relax de las medidas de aislamiento y distanciamiento social”.

Ante esta relajación se quieren instaurar medidas estrictas porque «los brotes vienen dados por situaciones de ocio y fiestas que no nos podemos permitir. La situación debe colaborar en rechazar este tipo de comportamientos porque el relax de unos pocos puede ser el motivo de preocupación de muchos».

«Tenemos que proteger a empresas, trabajadores y al sector productivo. No me resigno a pensar que la nueva normalidad es posible, pero para ello tenemos que tener unas medidas de control muy estrictas que verdaderamente nos sirvan para vivir lo más normal posible», ha dicho.

En su intervención, el titular de Sanidad extremeño ha destacado la necesidad de «actuar con contundencia y previsión» en la lucha contra el coronavirus en Extremadura, donde en la actualidad existen cuatro brotes, tres de ellos en la ciudad de Badajoz y uno en Navalmoral de la Mata.

Con estos datos, Vergeles ha considerado que la situación epidemilógica de la comunidad extremeña «todavía es buena», pero ha defendido esta medida de uso obligatorio de la mascarilla que «es cierto que provocará algunas incommodidades», pero también supondrá «un benficio para poder seguir transitando en la nueva normalidad, y no volver a las fases de reescalada».

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado serán los encargados de controlar el uso obligatorio de la mascarilla, cuyo incumplimiento puede provocar sanciones de unos 100 euros, ha avanzado.