La Junta de Extremadura autorizará industrias agroalimentarias, residenciales autónomos y actividades culturales y educativas en el medio rural para dinamizar la economía y fijar población al territorio en las zonas no urbanas de la región.

El Consejo de Gobierno, reunido en sesión extraordinaria, ha aprobado este viernes un decreto ley de medidas urbanísticas y de ordenación del territorio con el que se pretende agilizar los trámites para la implantación de actividades económicas en los municipios de la región.

La consejera de Agricultura, Begoña García Bernal, ha explicado que actividades como casas rurales, industrias agroalimentarias, actividades culturales, educativas de investigación, producción de energías renovables de hasta 5 Mw. y residenciales autónomos se considerarán usos compatibles y pueden ser permitidos en el medio rural para fijar población al territorio.

La consejera ha subrayado la importancia del sector agroalimentario, del turismo y de las energías renovables como “tridente” que debe impulsar la economía de Extremadura, y son esos sectores, ha dicho, los que más se verán beneficiados por la puesta en marcha de estas medidas.

Asimismo, ha destacado el papel que tienen la sostenibilidad, el respeto al medio ambiente y la fijación de la población al territorio como ejes principales del gobierno regional.

“Vamos a facilitar y acortar al máximo los plazos”, ha asegurado, para que cuando decaiga el estado de alarma puedan comenzar obras y proyectos durante el verano y a lo largo de este año 2020.

La consejera ha reiterado que, una vez concluidos el estado de alarma y la fase de desescalada, y ya en la situación de “nueva normalidad”, al igual que  mucha gente ha estado trabajando en el cuidado de la salud de las personas, será necesario trabajar también por la salud de la economía.