Un hombre vecino de Cáceres de 56 años de edad ha presentado una denuncia tras ser agredido en el transcurso de una discusión cuando caminaba por una calle de la ciudad portando una bandera de España y una camiseta con un lema que indicaba "Sánchez dimisión".

El suceso tuvo lugar en la calle Gil Cordero minutos antes de la cacerolada convocada contra el Gobierno, cuando otro ciudadano se acercó a la víctima y le propinó dos puñetazos en la cabeza. Los hechos se han puesto en conocimiento de la autoridad judicial tras la presentación de la oportuna denuncia.

El Partido Popular de Extremadura ha condenado la agresión por considerar que es "inadmisible2 en un estado democrático como el nuestro", al tiempo que "ha llamado a todos los representantes políticos, a cualquier escala, a que muestren también su rechazo para evitar que se sigan produciendo en lo sucesivo".

El PP siempre ha condenado cualquier tipo de violencia, así como los escraches, sean a quien sean, y a pesar de que personas que hoy ostentan cargos públicos en el Gobierno de la nación, en su día, los justificaran calificándolos como “jarabe democrático”.

Además, el PP ha recordado que la bandera de España es un símbolo constitucional "que nos representa a todos, y por ello debería ser un emblema también de la pluralidad y las libertades consagradas en la Carta Magna".

En un comunicado difundido a última hora de este jueves, el PP regional indica que "ayer fue en la localidad de Moratalaz, hoy ha sido en Cáceres y mañana puede ser en cualquier otro lugar de España" y ha asegurado que estas acciones son la consecuencia de que algunos, en público, señalen e instiguen en contra de los que no apoyan al Gobierno.