ISABEL BARRANTES 

La Audiencia de León ha condenado a un hombre, conocido como el pederasta de Carucedo, a 46 años de prisión por una docena de delitos de abusos sexuales, así como por un delito de revelación de secretos. Además también tendrá que indemnizar con 3.000 euros a 12 de los menores y con 1.000 a los cuatro restantes.

Cabe destacar que los hechos tuvieron lugar en los veranos de 2011 y 2012 cuando el ejercía como director de campamentos celebrados en Carucedo y también en el municipio cacereño de Guijo de Santa Bárbara. El pederasta aprovechaba la madrugada, cuando los jóvenes estaban dormidos, para realizarles tocamientos y abusos sexuales y grabar lo que hacía con una cámara de visión nocturna.

Según asegura la Audiencia de León, en el momento de cometer los hechos el condenado se encontraba “en la plenitud de sus capacidades cognitivas” y descarta que tuvieran “una sintonía patológica incapacitante o un trastorno de la personalidad”.

Asimismo la sentencia también ha probado que en 2011 el pederasta colocó de forma intencionada una cámara oculta en una mochila de un club deportivo de Madrid del que era monitor de natación, consiguiendo de este modo imágenes de personas sin identificar mientras se cambiaban de ropa.