La Asociación Ecologistas en Acción Granadilla está realizando un estudio del ADN sobre la población del mastín de campo en la comarca, en colaboración con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el Museo de Ciencias Naturales de Madrid, además del grupo para la cría y manejo responsable del perro mastín español (ORTROS).

El propósito del estudio es llevar a cabo investigaciones y pruebas genéticas para reducir enfermedades hereditarias de elevada prevalencia, como la displasia de cadera canina; promover el desarrollo de la ganadería extensiva y las razas autóctonas, a través de proyectos científicos y de divulgación, ayudas a la ganadería trashumante a través de la colaboración con la Asociación Trashumancia y Naturaleza y, por último, donación de cachorros a ganaderos que sufran ataques de depredadores.

Con ORTROS colaboran Jesús Garzón, Carlos Sanz e Ignacio Doadrio, autor del "Manual de campo del mastín español", en el que refleja la actual situación de la raza, desmarcándose del mastín exposición de belleza y buscando el que cumple la función de protección al ganado, un libro muy bien orientado para la conservación de los escasos mastines de la comarca.

Carlos Pino, responsable del Área de Naturaleza de Ecologistas en Acción Granadilla, considera un éxito la colaboración con Doadrio y continuará próximamente con la realización del estudio de campo en la comarca de Granadilla, en la que se están descubriendo grandes mastines, especialmente en la zona de Guijo de Granadilla y Zarza de Granadilla.

Por último, Pino ha solicitado la colaboración a los ganaderos de la zona de estudio para conservar el mastín, que constituye una ayuda medioambiental y ganadera de primer orden, al permitir la convivencia de los depredadores y la ganadería, evitándose la utilización de cepos, lazos, cajas trampas, venenos y furtivismo, todos dañinos para la fauna silvestre.

De otro lado, Carlos Pino ha solicitado a la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía de la Junta de Extremadura su autorización para fotografiar al lince ibérico en las comarcas de Granadilla, Hurdes y Sierra de Gata, al objeto de confirmar la presencia efectiva de linces ibéricos en libertad en las citadas zonas, que sería una noticia de primer orden para soltar linces en estas comarcas, impidiendo la pérdida genética de los últimos linces nómadas que sobreviven en tan buenos hábitats.