El teléfono móvil se ha convertido desde hace años en un elemento imprescindible para el desarrollo de nuestra vida cotidiana, aumentando cada día sus prestaciones y la infinidad de servicios que nos ofrecen. Muchos modelos de uso habitual se han convertido en pequeñas joyas tecnológicas que, por su alto valor, se han convertido en objetivo de los delincuentes, bien para su propio uso o bien para su posterior venta en el mercado ilícito.

De igual forma, estos dispositivos de comunicación se han convertido en importantes aliados para los investigadores policiales que con su localización y recuperación, se han convertido en pruebas de cargo que han permitido esclarecer diversos tipos de delitos que se han perpetrado en la Ciudad de Cáceres. Así, en lo que va de año agentes adscritos al Grupo Operativo de Delincuencia Urbana de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Cáceres, han recuperado un total de 25 teléfonos móviles, la mayoría de alta gama, que han permitido esclarecer otras tantas investigaciones por los delitos de hurto, robos con fuerza e intimidación y apropiaciones indebidas. En este sentido, es conveniente recordar que encontrar un móvil extraviado y apropiárselo por quién se lo encuentra, sin ponerlo a disposición de la Policía, constituye una infracción penal  que da lugar a responsabilidad penal por la apropiación indebida del mismo.