La consejera de Cultura y Turismo, Manuela Holgado, asiste al Festival de Flamenco de Nimes (Francia), en su edición de 2011, donde presenciará mañana miércoles 12, a las 18:30 horas, la representación de "Majareta", de la compañía extremeña Albadadulake.
Esta producción recibió ayudas a la producción de la Consejería de Cultura y Turismo por un valor de 22.000 euros. "Marajeta" es un espectáculo muy logrado, la confluencia entre el circo y el flamenco, el baile y la acrobacia, las artes visuales y el teatro callejero, donde los ritmos de una bulería pueden de repente ser de rock, en un delirio de imágenes.
Nacida en 2001 del encuentro entre un malabarista, Juan Antonio Moreno Fernández, conocido como «Chato», formado en la escuela de Circo de Montreal, y de la bailaora flamenca Ángeles Brea, la compañía Albadulake, ubicada en Extremadura, explora este territorio nuevo en un ambiente frenético, abiertos a las corrientes más innovadoras o creativas del circo contemporáneo. Estos flamencos de la tercera fase revisan su cultura con mucha energía y sentido del humor.
Sobre el escenario, una inmensa televisión destaca entre un crucifijo y la foto de una pareja de recién casados, adorna la inevitable muñeca andaluza, tótem obligado de la cultura popular española. De repente, la pequeña pantalla explota y la atmósfera sobria de una España de color sepia se transforma en una fiesta desenfrenada. La bailaora flamenca resplandece en el corazón de un plató invadido por la locura y donde los circenses se entregan a tope.
Cabe recordar que Andalucía, Murcia y Extremadura promovieron la candidatura presentada a la UNESCO, organismo que procedió a la declaración del Flamenco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad el pasado mes de noviembre en Nairobi (Kenia).
Extremadura ha hecho un gran aporte al flamenco a lo largo de la historia. Baste nombrar a cantaores que dejaron huella, como Pérez de Guzmán, Manolo de Fregenal, El Indio y el sin par Porrina de Badajoz, así como las aportaciones al árbol del flamenco de los tangos y jaleos extremeños, y estilos personales como las tarantas del molinero, el fandango de Fregenal o de Pérez de Guzmán, entre otros.
