El pleno municipal de ayer hizo que el Plan General de Urbanismo (PGM) entrara en una nueva fase, en la que por un lado se evidenció el consenso del equipo de gobierno y por otro la soledad del PP ante la moción que presentaba a este pleno, y en la que proponía aprobar el PGM con la inclusión de 96 de las 110 alegaciones planteadas por la Comisión Regional de Urbanismo. La proposición fue desestimada con 13 votos en contra (los de PSOE, IU y FC) después de que Vela comprometiera su voto al plan "de consenso" que elabora el Gobierno Municipal y que ayer perfiló el portavoz socialista, Lorenzo de la Calle. "Este es un plan mejor que el que actual, porque el actual está enquistado", respondió De la Calle a la pregunta con la que el portavoz del PP cerró la defensa de su moción, solicitando el voto de Vela para desatascar el texto actual: "¿Es que alguien tiene, hoy por hoy, otro plan?", preguntó entonces Castellano.

"Es un plan del consenso de todas las fuerzas políticas que quieran sumarse a él y nace apoyado en dos premisas sustanciales, que son el principio de legalidad y el se sostenibilidad", afirmó De la Calle; a las que Vela añadió "la de mayoría absoluta". Así garantizaba su voto al PGM que PSOE e IU le habían presentado en la reunión que mantuvo con Heras y Pavón el pasado martes. Vela no había confirmado entonces su apoyo al plan "a la espera de que el PP nos hubiera dado una alternativa y no lo ha hecho", afirmó.

De la Calle defendió que el plan ellos proponen limita la planificación urbanística del territorio y el desarrollo se realice "solo a medio plazo", siguiendo los dictados de la ley de ordenación del suelo de Extremadura. Además señaló que este nuevo plan apuesta por un modelo de desarrollo "armónico" de la ciudad en el que desecha "la gran expansión urbanística planteada inicialmente en le revisión del PGM, con una extensión residencial desorbitada y sin definición del modelo de ciudad", por el que se apostaba.

Del plan que ellos están elaborando con IU, De Calle avanzó que en base a esos dos principios, proponen conciliar el desarrollo urbano con el medio rural, "por lo que se mantiene la protección de la Sierrilla y parte de la Montaña". Además propone integrar en el desarrollo de la ciudad tres zonas emblemáticas como son la Ribera del Marco, la ciudad monumental y el conjunto minero de Aldea Moret. En el pleno de ayer no se dieron cifras sobre pisos o sistemas generales –cuestiones que se abordarán en las comisiones de Urbanismo-.