Los residentes de la calle Extremadura de la pedanía de Villafranco del Guadiana se llevaron ayer un gran susto al ver que salían llamas de la casa de María del Carmen Martínez, la vecina del número 16, quien les confesó en su misma puerta "que lo había hecho ella porque había discutido con su pareja".

El incendio se inició a la una de la tarde y los bomberos acudieron al lugar tras recibir un aviso del 112. Se desplazaron dos camiones autobomba y un coche de mando. Cuando llegaron, la dueña de la casa, que estaba bastante alterada, le dijo al jefe de guardia, José Manuel Pagador, "que había tenido problemas con su pareja y le había pegado fuego a la casa", relató éste.

La investigación de los bomberos corroboró la confesión de la mujer, ya que encontraron que el incendio había sido intencionado, puesto que tenía varios focos, uno en el dormitorio y otro en el salón. La vivienda, un dúplex, quedó afectada en un 90% por el humo y las llamas, aunque los daños más importantes se registraron en el dormitorio, que quedó completamente calcinado, y en el salón. También se quemó por completo la instalación eléctrica.

 

ATENDIDA POR CRUZ ROJA Mientras los bomberos extinguían las llamas y ventilaban la vivienda, la mujer era atendida por una dotación de la Cruz Roja, que la trasladó al Infanta Cristina, donde los médicos evaluarán su estado psicológico.

Los vecinos que se agolpaban en la calle no pudieron disimular su malestar, ya que, según dijeron, esta mujer no es la primera vez que hace algo así. "Hace tiempo, cuando vivía con su marido, quemó el coche de éste en el corral", según José Antonio, un vecino que además es bombero, aunque ayer no estaba de servicio. "Con los vecinos, en general, ella no suele tener problemas, se comportan normal, es cuando discute con sus parejas cuando se pone así", señaló.

Sin embargo, en su calle aseguraban no estar ya tranquilos, "si llega a hacer esto de noche, no lo contamos", manifestó una mujer. Su vecina de al lado, Angela, a la que el humo le entró en la casa, explicó que "ya estamos cansados de quejarnos, tendremos que denunciar para que no vuelva a hacer algo así, porque no vivimos tranquilos, si nos descuidamos quema también nuestra casa".

La mujer, que residía con su actual pareja en la vivienda, tiene una hija que vive fuera.