El proyecto para la recuperación de la margen derecha del Guadiana se licitará el próximo año, si las administraciones se ponen de acuerdo en la financiación. Así lo manifestó el director técnico de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), José Martínez, cuando se le preguntó por el estado actual del proceso que está en marcha.

Esta afirmación se basa en la visita que realizaron los técnicos de la Administración autonómica a la zona para realizar los informes preceptivos y remitirlos al ministerio, a Madrid. "El proyecto de recuperación de la margen derecha sigue su tramitación ambiental; por parte de los técnicos de la Junta se hizo una visita al lugar hace 15 días y ahora estamos pendientes de recibir el informe". Con dicho informe se procederá, "con la dirección general, a la aprobación ambiental y por parte del ministerio a la aprobación definitiva del proyecto para poder licitarlo", según las palabras de Martínez.

El director técnico de la CHG afirmó: "Se espera que pueda ser ya", y que hay "mucho interés por parte de la Junta y de la dirección general, y también del ayuntamiento, con lo que si se ponen de acuerdo las administraciones interesadas puede salir a licitación a lo largo del 2008".

Los técnicos de la Junta han recorrido el trayecto de la actuación prevista, desde el cruce de la autovía A-5 con la carretera de Cáceres hasta la conexión del guadiana con la desembocadura del río Caya en éste, unos 12 kilómetros con varias anchuras.

Los técnicos, dentro de sus competencias, podrán dictaminar "si las actuaciones previstas suponen una mejora ambiental, o bien poner limitaciones, pero la impresión es que vieron factible el proyecto". Con alguna cautela, "como por ejemplo no talar algún tronco de árbol seco y dejarlo para posadero de aves".

El coste previsto del proyecto es de unos 30 millones de euros, "sin contar con las expropiaciones necesarias, del terreno que se disponga de titularidad pública y de si es urbanizable, o rústico y las valoraciones a que se lleguen", explicó José Martínez, quien expresó que el proyecto está redactado y que los "técnicos evacuarán sus informes antes de final de mes".

Sobre lo que no se pronunció es sobre el futuro de las construcciones que quedan, en ruinas, en las huertas y las antiguas Moreras, que se derribarán, o no, conforme al proyecto dependiendo de si entran en él o quedan fuera y dependiendo de otras actuaciones, "si entran se procederá a los derribos", dijo. Lo que sí se mantendrá son el molino de los Ayala y la fábrica de luz en la pesquera.