El segundo encierro matinal de las fiestas de San Buenaventura en Moraleja finalizó sin incidentes y estuvo protagonizado por la gran velocidad que alcalcanzaron las reses por el recinto ya que hicieron el recorrido en un tiempo de un minuto y treinta y cuatro segundos.

Los seis novillos de la ganadería de Mercedes Pérez Tabernero realizaron el recorrido acompañados por cinco cabestros de Enrique Serrano. La novillada estuvo compuesta por tres astados castaños, dos negros y uno berrendo.

Uno de los novillos encabezó la manada y fue el primer astado en llegar a la plaza de los toros. Durante el recorrido varios corredores cayeron al suelo e incluso uno de los astados tropezó en una de las curvas, aunque finalmente fue un encierro rápido y en el que no hubo que lamentar daños personales.

No obstante los servicios médicos tuvieron que atender a dos personas por mareos y bajadas de tensión provocados por las altas temperaturas. Un hombre de avanzada edad y con problemas diabéticos sufrió una bajada de tensión y una subida de azúcar. Inmediatamente los servicios médicos se movilizaron para trasladar al paciente al centro de salud, aunque finalmente y dado al cuadro diabético de este hombre, fue atendido en el quirófano móvil.

También una niña de tan sólo 12 años tuvo que recibir asistencia médica tras sufrir un mareo, provocado probablemente por las elevadas temperaturas que llegaron hasta los 39ºC a la sombra en las horas centrales del día, durante el transcurso de la celebración del festejo taurino.