Extremadura ha ejercido durante el primer trimestre de 2025 las funciones de representación y coordinación autonómica en el Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (EPSCO) de la Unión Europea, bajo la presidencia de Polonia, en su configuración de Sanidad.

En la reunión celebrada el 20 de junio en Luxemburgo, Extremadura trasladó la posición conjunta de todas las comunidades autónomas españolas sobre las Conclusiones sobre la promoción y protección de la salud mental de niños y adolescentes en la era digital.

Las comunidades coinciden en la urgencia de afrontar los crecientes desafíos que afectan al bienestar emocional de la infancia y adolescencia, derivados del uso intensivo de pantallas, el ciberacoso y la exposición a contenidos perjudiciales en entornos digitales. 

Según los datos presentados, el 70 % de los trastornos mentales se originan en estas etapas de la vida, lo que refuerza la necesidad de medidas preventivas eficaces y tempranas.

El documento consensuado por las regiones reclama que la salud mental infanto-juvenil se integre como prioridad estratégica en todas las políticas públicas, desde la educación y los servicios sociales hasta las tecnologías y la cultura. Se hace especial hincapié en los colectivos más vulnerables: menores en situación de pobreza, con discapacidad, con antecedentes traumáticos o residentes en zonas rurales.

Asimismo, las comunidades abogan por fomentar estilos de vida saludables, reducir el tiempo ante las pantallas y promover un uso responsable de las tecnologías. Otras demandas clave incluyen la formación del profesorado, el acompañamiento a las familias y la regulación del acceso a redes sociales en edades tempranas.

Especial preocupación genera el impacto digital en niñas y adolescentes, especialmente expuestas a violencia de género, estereotipos y presión estética, por lo que se reclama incorporar la perspectiva de género en todas las estrategias preventivas.

Finalmente, Extremadura y el resto de comunidades solicitan que la salud mental infantil y juvenil sea reconocida como prioridad específica en el próximo Marco Financiero Plurianual de la UE, garantizando recursos adecuados, cooperación entre Estados miembros y un enfoque basado en derechos, equidad y perspectiva de género.