Los hechos se desencadenaron cuando el detenido se aproximó a una mesa ocupada en la terraza de un bar y, sin mediar palabra, se apropió del dinero que había sobre la mesa.
El individuo accedió al comercio con el rostro cubierto y, tras amenazar al empleado con un cuchillo de grandes dimensiones, logró sustraer el dinero de la caja registradora y dos teléfonos móviles.