El Servicio Extremeño de Salud (SES) ha levantado las restricciones impuestas al agua para el consumo humano en la localidad pacense de Villafranca de los Barros.

Así, la Dirección General de Salud Pública ha resuelto la situación de posible riesgo para la salud derivada de la desviación de los valores de turbidez y color del agua después de una «exhaustiva evaluación y análisis».

La misma ha determinado que los resultados de la última prueba muestran niveles «adecuados y seguros» para el consumo humano, indica la Junta de Extremadura en nota de prensa.

No obstante, el SES avanza que continuará realizando controles exhaustivos y periódicos para garantizar que el agua mantenga los estándares de seguridad establecidos y que siga siendo apta para el consumo humano.

En la foto de archivo, una persona llenando un vaso de agua.