Desde el 1 de enero la gasolina y el gasóleo en Extremadura cuestan más. Esta subida es fruto del impuesto sanitario que la Junta de Extremadura ha aplicado a los hidrocarburos lo que ha supuesto un aumento de 2,4 céntimos el litro de gasolina y 2 el gasóleo A.
La red de gasolineras extremeñas Iberdoex considera que no es el momento oportuno para la subida de este impuesto sanitario que coincide con el incremento de precios de carburantes y la subida de luz y la de la bombona de butano.
Desde la red de gasolineras extremeña asegura que "estamos sufriendo una carga impositiva enorme y este impuesto podía haberse retrasado o lo más lógico eximido ya que va a suponer un aumento considerable en el precio".
Iberdoex destaca que el incremento de precios no va a ir acompañado de un aumento de beneficios para las estaciones de servicio sino que "nos convertimos en meros recaudadores de la hacienda pública, debemos tener en cuenta que más del 50% del precio del carburante ya son impuestos".
Este aumento del precio, aseguran, "vendrá acompañado de una reducción de las ventas y el objetivo que busca la administración de recaudar más al fin al desembocará en una relentización de las ventas".
Desde la red de gasolineras extremas Iberdoex, manifiestan su más profundo rechazo a esta medida tomada por la administración.
