La Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Junta de Extremadura está finalizando las obras de acondicionamiento de la red viaria existente en el paraje de la Sierra de la Mosca de Cáceres. Según la titular de la Consejería, Camino Limia, «estas obras van a mejorar considerablemente la seguridad de este enclave cacereño, que cuenta con abundante número de segundas residencias y acoge el Santuario de la Virgen de la montaña, de especial significación para los vecinos de Cáceres. Una actuación muy demandada por los afectados y que es ya una realidad».

Con un plazo de ejecución de nueve meses, el proyecto cuenta con 635.238,89 euros de inversión, actuando en una superficie aproximada de unas 60 hectáreas. Las actuaciones han perseguido un doble objetivo: la mejora en la seguridad de los ciudadanos y la mejora en la eficiencia de extinción.

En cuanto a la mejora en la seguridad de los ciudadanos, la actuación en la red de accesos, fundamentalmente con las nuevas aperturas de caminos y adecuación de otros, permitirá que la planificación de las evacuaciones cuente con varias alternativas nuevas de escape. Todo ello redundará en la seguridad de ciudadanos y el personal de los distintos organismos que actuarán en la posible emergencia, aseguran desde la Junta de Extremadura.

En cuanto a la mejora en la eficiencia de extinción, las aperturas y ensanche de caminos permitirán la llegada de vehículos pesados de extinción a determinados puntos estratégicos o vulnerables que anteriormente era imposible o muy peligrosa. Además, dichos caminos servirán para anclar operaciones de extinción y mejorarán la seguridad de los bomberos.

La construcción de los depósitos permitirá principalmente optimizar el trabajo de los medios aéreos, mejorando su cadencia de descargas. Los medios terrestres también los utilizarán y mejorarán su efectividad sobre todo en la zona de la umbría. Como actuaciones más concretas se han llevado a cabo fajas auxiliares asociadas a red de accesos, apertura de caminos en el Aulladero de los lobos a camino de Sierra de Fuentes, Valdeflores de Arriba, Casa del Portanchito y Valhondo, dos unidades de puntos de agua con capacidad para 126.000 litros, fajas auxiliares asociadas a veredas y hormigonados de traza y pasos de agua en Hormiga a Cerro Milano y Portanchito.

SOBRE LA SIERRA DE LA MOSCA

Llamamos Sierra de la Mosca a una alineación montañosa, orientada en general de noroeste a sureste, que enlaza los cascos urbanos de Cáceres y Sierra de Fuentes. Tiene acentuadas pendientes y una vegetación mediterránea característica, con presencia de alcornocales en las umbrías y encinares en las solanas, además de extensos matorrales, propios de estados de degradación de los ecosistemas (jarales y brezales en general).

Esta sierra tiene un gran riesgo estructural frente a los incendios, fundamentalmente debido al abandono del campo y las pérdidas de usos tradicionales del mismo. Con poca carga ganadera, sobre todo en la periferia de la sierra, aumenta considerablemente la acumulación de combustible fino. Hay que añadir la proximidad al casco urbano de Cáceres, favoreciendo, sobre todo a finales del siglo XX, una edificación sin planificación específica. Por ello, las vías de tránsito han venido presentando dimensiones no acordes a la actual y fuerte presencia humana.

Coincide precisamente la mayor presión humana en verano, la época de mayor riesgo de incendios. Muchos de los viales presentaban escasa anchura, con dificultad o imposibilidad de tránsito para cualquier vehículo, mucho más para los camiones de extinción. En muchos casos no era posible el cruce de vehículos, no había caminos de vuelta imprescindibles para las maniobras y había viales sin salida.

Desde el punto de vista social, se trata de un entorno de gran valor, asociado a la presencia del Santuario de la Virgen de la Montaña y con numerosos senderos de gran belleza y riqueza ecológico-paisajística, lo que aumentaba, más si cabe, la necesidad de protegerlo frente al riesgo de incendios forestales y hacerlo con un impacto visual bajo.

En lo referente a incendios forestales, la Ley de Montes determina que corresponde a las Administraciones Públicas competentes la responsabilidad de la organización de la defensa contra incendios forestales, debiendo adoptar medidas encaminadas a la prevención, detección y extinción de los incendios forestales, medidas en las que se enmarcan estas obras.