Un centenar de profesores, estudiantes y personal de la comunidad educativa de la Universidad de Extremadura ha recibido esta mañana al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, con una sonora pitada entre gritos de «No a la mina» y «Vara dimisión».

El presidente extremeño acudió a las 09:30 de la mañana al campus universitario de Cáceres para participar en la jornada «Proyectos con anclaje territorial en Extremadura» celebrada en el edificio de los Institutos de Investigación, en la Avenida de las Ciencias. Al acto también estaban invitados varios empresarios que promueven proyectos en Extremadura, entre ellos los responsables de la mina de litio que se pretende construir en el paraje de Valdeflores, en La Montaña de Cáceres.

Los manifestantes recibieron a Vara con decenas de pancartas en las que podía leerse «No a la mina», acompañados de abucheos, silbidos y gritos pidiendo su dimisión. El presidente extremeño recorrió el trayecto desde el vehículo oficial hasta la entrada del edificio en medio de los manifestantes sin dirigirse a ellos y aguantando las críticas recibidas.

La plataforma «Salvemos la Montaña de Cáceres» ha criticado la presencia de los responsables del proyecto minero en la Universidad de Extremadura y ha asegurado que New Energies, promotora del proyecto, no obtendrá la licencia social «ni comprando con su sucio dinero voluntades, ni financiando asociaciones, festivales de cine o promocionándose en la Universidad de Extremadura (UEx) de la mano de un profesor ecuánime».

La empresa promotora de la mina ha alcanzado acuerdos con la UEx para la celebración de seminarios y otras actividades formativas y la comunidad educativa ha rechazado que se implique a la universidad en un controvertido proyecto que mantiene dividida a la ciudad.

El vocal de medio ambiente del Consejo de Estudiantes de la UEx, Ángel Andreo, ha señalado la incongruencia que, bajo su punto de vista, presenta el proyecto minero, que atenta «contra la salud pública, contra la economía y está basado en falsedades». En su opinión «no cuadran las cifras» de la empresa minera, a la que ha acusado de crear perfiles falsos en las redes sociales y de suplantar la identidad de movimientos sociales para ganarse la licencia social.