La Junta de Extremadura está sometiendo a información pública, durante un período de 30 días hábiles, el proyecto de la empresa Lithium Iberia S.L. para el aprovechamiento integral del litio en torno a la explotación de la mina ‘Las Navas’. El anuncio ya se ha publicado esta jornada en el Diario Oficial de Extremadura.

Esta explotación se encuentra en los términos municipales de Cañaveral, Holguera y Pedroso de Acim. La documentación publicada comprende el plan de restauración y el proyecto de explotación de la solicitud de aprovechamiento de recursos de la sección c de la Ley de Minas denominada concesión de explotación derivada ‘Las Navas’.

También incluye el estudio de impacto ambiental de dicho proyecto de explotación y la solicitud de Autorización Ambiental Integrada referida al proyecto de la planta de beneficio asociada a dicha explotación minera.

El proyecto minero contempla un periodo de explotación mixto de 30 años, 24 de los cuales se realizarían en minería subterránea. La Junta de Extremadura considera que con este anuncio se avanza en la tramitación del expediente de concesión de explotación de este proyecto, que abarca toda la cadena de valor del litio y que presenta un evidente potencial estratégico para el desarrollo industrial de Extremadura.

La empresa tiene la mirada puesta en una zona rural de Cañaveral, en la provincia de Cáceres, en un yacimiento con una de las mayores reservas de litio de la Unión Europea y contempla además de la actividad minera, la construcción de una planta de beneficio minero para la producción de hidróxido de litio grado batería. Se van a integrar en los procesos y la producción novedosos avances en minería verde que posicionarán Las Navas como la explotación minera más sostenible de Europa.

La sociedad asegura que es una empresa que se alinea con la minería del futuro, con la minería verde 4.0 o Green Mining, que incorpora a los procesos todos los avances en la transformación digital, como la electrificación de la maquinaria, uso de inteligencia artificial y de «big data», obteniendo la reducción de consumos energéticos, hídricos y de emisiones.

La empresa además indica «que no cabe duda de que la introducción de tecnologías digitales nativas de la industria 4.0 generará un cambio de paradigma en la forma de operar dentro de la actividad minera».  La cadena de valor se tenderá a integrar horizontalmente, minimizando la variabilidad y aumentando la predicción y estabilidad de los procesos.

El pasado mes de septiembre la sociedad manifestó que el proyecto minero-industrial que está desarrollando en la zona rural de Cañaveral prevé desde su inicio la extracción y también, el tratamiento posterior de Litio hasta llegar al hidróxido de litio grado batería en Extremadura. Por ello, según la firma, el proyecto cumple con todos los requisitos recogidos en los artículos del decreto-ley.

Mediante esta norma, la Junta establece que “el otorgamiento de cualquier concesión de explotación de los recursos minerales de litio en Extremadura estará vinculado y condicionado al cumplimiento de la obligación de que el tratamiento y beneficio metalúrgico y mineralúrgico de los recursos de este mineral se realicen necesariamente en el territorio de la Comunidad Autónoma de Extremadura”, según explicó la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García.

El decreto–ley declara de interés general el aprovechamiento de los recursos minerales de litio, existente o potencial, en todo el territorio de Extremadura y recoge que será de aplicación a los procedimientos de explotación de los recursos mineros de litio que a la fecha de entrada en vigor del decreto estén en trámite y no resueltos.

COLECTIVOS EN CONTRA

Existen en Extremadura varios colectivos que ya se han posicionado públicamente en contra de «esta megamina que se quiere realizar». De hecho, se ha creado un plataforma en contra de la mina que indica que el proyecto de   el espacio  se trata de una zona que sirve de enlace y corredor ecológico entre varios espacios protegidos, como son la Reserva de la Biosfera de Monfragüe, la ZEPA Monfragüe y las Dehesas del Entorno y la ZEC Monfragüe a unos 3 kilómetros al noreste de la zona de explotación de la mina, y la ZEPA Canchos de Ramiro y Ladronera a menos de 1 kilómetro al sudoeste de la misma. Siendo la mayoría de estos espacios integrantes de la Red Natura 2000, y por tanto protegidos por normativa europea.

El proyecto afectaría a los ecosistemas naturales de los pueblos de Cañaveral, Grimaldo, Casas de Millán, Pedroso de Acím, Holguera, Portezuelo o Torrejoncillo. El proyecto provocaría la destrucción de hábitats y la contaminación de la cuenca del río Alagón y Tajo donde irían a parar los residuos tóxicos de la mina, según indican desde la plataforma.

Además, insisten, afectaría negativamente y de manera directa a los vecinos de la localidad de Grimaldo, debido a que la zona de interés para la explotación estaría a unos 250 metros del núcleo urbano.