La portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha pedido explicaciones este miércoles a la Confederación Hidrográfica del Guadiana y al gobierno de Vara ante las inundaciones de algunos pueblos, como es el caso de Madrigalejo.

De Miguel considera que esto podría haberse evitado si se hubiera procedido a desaguar algunos embalses ante la previsión de fuertes lluvias, pero sospecha que no se ha hecho “porque alimentan la refrigeración de las termosolares”.

En la comisión de Transición Ecológica y Sostenibilidad, De Miguel ha afirmado que, de confirmarse, esto demuestra que “ha premiado más el interés general de las eléctricas al interés general de la ciudadanía” y ha recordado que precisamente hace una semana sí que se procedió al desembalse de Alcántara, “pero no precisamente por previsión de lluvias sino para producir energía barata”.

De Miguel ha lamentado que el gobierno de Fernández Vara sea “cómplice” de estos abusos y ha exigido al director general de Industria, Energía y Minas que “empiece a defender ya a los extremeños y al agua de los embalses del expolio de las eléctricas”.

Para la presidenta de Unidas por Extremadura esto no es más que otro ejemplo de que “Extremadura es una colonia energética”, como lo es la construcción de la subestación eléctrica de Olivenza o “como lo es también que seamos la pila verde de Europa, pero mientras cerremos bibliotecas por el alto precio de la luz o que tengamos que despedir a docentes para poder pagar la calefacción de los centros escolares”.

Irene de Miguel también ha aprovechado la ocasión para mostrar la solidaridad de Unidas por Extremadura con todas las personas afectadas por la borrasca Efraín y ha agradecido la labor que están realizando los servicios de emergencias, las fuerzas de seguridad, los medios de comunicación y todas las personas “que están trabajando para que cuanto antes Extremadura vuelva a la normalidad”.