La Guardia Civil ha investigado a un joven de 25 años, por conducir un vehículo en sentido contrario por la autovía A-66 a la altura de la localidad pacense de Almendralejo bajo la influencia de bebidas alcohólicas.

Al investigado se le atribuye los supuestos delitos de circular bajo la influencia de las bebidas alcohólicas y conducción temeraria «con manifiesto desprecio para la vida de los demás», según explica la Guardia Civil en nota de prensa.

Este joven circulaba un vehículo en ‘zigzag’ durante varios kilómetros «por una vía de doble sentido de circulación, invadiendo en varias ocasiones el sentido contrario», e incluso llegó a incorporarse en sentido contrario, por una vía con un único sentido de circulación, «obligando a varios vehículos, que circulaban correctamente por su carril, a realizar maniobras bruscas de frenado» para evitar un accidente.

La actuación se inició cuando el Sector de Tráfico de Extremadura recibió una llamada de un ciudadano informando de que el conductor de un turismo conducía en zigzag, por la carretera N-630 y posteriormente accedió a la autovía A-66, a la altura de la localidad de Almendralejo en sentido contrario de la circulación.

Antes de que llegara la Guardia Civil, este vehículo sufrió un accidente a la altura del punto kilométrico 656 de la carretera A-66 (Autovía de la Ruta de la Plata).

Al realizar las pruebas de alcoholemia, el conductor arrojo un resultado de 0,62 mg de alcohol por litro de aire espirado, mostrando «evidentes síntomas de ir bajo la influencia de bebidas alcohólicas», por lo que se le instruyeron diligencias por dos delitos contra la seguridad vial, conducción temeraria con manifiesto desprecio por la vida de los demás y circular bajo la influencia de las bebidas alcohólicas, enfrentándose el conductor, a penas de hasta doce meses de prisión, y la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo entre uno y seis años.

El Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Extremadura agradece la colaboración ciudadana, que considera «fundamental para prevenir y actuar ante esta clase de delitos, contribuyendo con ello a erradicar el consumo de alcohol al volante que pone en grave riesgo al resto de usuarios de las vías», concluye.