Unos 500 agricultores se han concentrado este miércoles en el municipio cacereño de Villanueva de la Sierra para reclamar a las industrias precios justos para la aceituna, que según los productores son «ruinosos».

En la concentración, que ha sido convocada por la organización agraria La Unión Extremadura, han participado aproximadamente 40 tractores que han circulado en caravana desde Pozuelo de Zarzón, Hernán Pérez y Torrecilla de los Ángeles hasta Villanueva de la Sierra. La tractorada se ha llevado a cabo a pesar de no contar con la preceptiva autorización de la Delegación del Gobierno en Extremadura.

Los agricultores han acordado no entregar su producción de aceituna en la presente campaña si no existe un contrato con la industria transformadora. Además los convocantes han asegurado que no se comercializará la aceituna si no se garantiza un precio mínimo de 1,00 euros por kilogramo.

En Villanueva de la Sierra los olivicultores se han concentrado en el centro del casco urbano y varios tractores han dado vueltas en la rotonda del municipio haciendo sonar el claxon de sus vehículos. El acto de protesta se ha desarrollado en presencia de varios agentes de la Guardia Civil.

El secretario general de La Unión de Extremadura, Luis Cortés, ha asegurado a LA MAÑANA de Radio Interior que es «un año negro para la agricultora» debido, entre otros factores, a la sequía, las olas de calor, la subida incontrolada de precios o el retraso en la entrada en vigor de la Ley de la Cadena Alimentaria.

En este sentido Cortés ha dicho que los productores exigen cobrar «al menos lo que cuesta producir», máxime en una campaña en la que hay poca producción debido a la sequía y otros factores. El líder de La Unión de Extremadura ha pedido que los industriales sean conscientes de que cada día que pasa resulta más perjudicial tanto para ellos como para los olivicultores.

El paro convocado por esta organización agraria tiene carácter indefinido y los agricultores están convencidas de que resulta más rentable dejar el fruto en el árbol que recolectarlo por debajo de su precio. Por ese motivo se ha compartido la idea de que las protestas tendrán continuidad hasta que el precio permita cubrir los costes de producción.

Cortés ha indicado que le ha causado «gran sorpresa» la decisión de no autorizar la concentración, aunque ha aclarado que se ha alcanzado «un acuerdo con la Guardia Civil» para desarrollar la protesta si no producían problemas en el tráfico. En su opinión, no se trataba de meter 500 tractores en una zona de carreteras estrechas, sino de hablar exclusivamente del precio de la aceituna.