El Colegio Oficial de Médicos de Cáceres ha apelado a la responsabilidad del ciudadano y a hacer entender que esta Navidad no puede ser como la anterior, sino más tranquila y silenciosa porque el virus es impredecible.

Los médicos de Cáceres recuerdan que  “el  virus no sabe de días, ni meses. Los riesgos son los mismos, procuren que sean las mismas las precauciones. No hay ningún test que garantice la completa seguridad de ausencia de contagio, y menos aún los test de anticuerpos”.

La evolución de la pandemia empeora. Los casos confirmados en la región aumentan diariamente. Como corporación de derecho público cuya obligación es velar por la profesión médica y la salud de la sociedad, nos vemos en la obligación de insistir en la necesidad de que se extremen las precauciones.

Relajarse demasiado rápido y en exceso es un riesgo porque las desescaladas prematuras o levantar restricciones tempranamente puede encaminarnos a una tercera ola en el mes de enero, cuando aún no nos hemos recuperado de la segunda, han explicado en una nota de prensa.

“Son unas fechas emocionalmente arraigadas, pero las emociones hay que vivirlas con seguridad, sin riesgos. Eviten las grandes reuniones familiares y las celebraciones en lugares concurridos con el fin de reducir la propagación del virus. Si hay encuentros, preferiblemente deben ser en el exterior, reducidos, con distanciamiento físico, llevando mascarilla y cumpliendo todas las medidas de seguridad establecidas”, añade el comunicado.

La pandemia ha alcanzado ya los 74 millones de casos y los fallecidos ascienden a 1,6 millones en todo el mundo. “No queremos lamentar más muertes, más tragedias. Aunque mejoren mucho las cifras de contagios y hospitalizados no debemos olvidar que el virus seguirá entre nosotros. Por eso, para evitar un nuevo rebrote la mejor vacuna es nuestro propio comportamiento. Celebren, pero con sentido”.