Las ayudas de incentivos autonómicos para empresas extremeñas permanece abierta hasta el 31 de diciembre. Estas ayudas financian hasta el 45 por ciento de la inversión subvencionable con un mínimo de 2.000 euros para cada proyecto.

Esta medida permite realizar inversiones relacionadas con la creación de nuevas empresas, así como la consolidación de las ya existentes a través de proyectos de ampliación, modernización y traslado.

El Decreto 185/2017 que actualmente regula estas ayudas contempla tres líneas diferentes de ayudas. La primera de las modalidades se otorga atendiendo al sector de actividad en el que la empresa esté operando o vaya a operar (modalidad por actividad).

La segunda es por inversiones que supongan la continuación de un establecimiento que de otra forma hubiese cerrado, siempre que el motivo de ese cierre sea la jubilación, incapacidad permanente o fallecimiento de su titular (modalidad de relevo generacional).

El tercer tipo de ayudas tiene como finalidad subvencionar la transformación y adaptación a la industria 4.0, concepto que se refiere a proyectos que promuevan la transformación digital de la empresa y conlleven la introducción efectiva de tecnologías digitales en sus sistemas de comunicaciones, tratamiento de datos, inteligencia, análisis y gestión.

Cualquier empresa, especialmente pymes de cualquier sector de actividad, podrá optar a la subvención cuando tenga previsto realizar inversiones en activos fijos, salvo los sectores excluidos por la normativa europea.

En cuanto a las inversiones que subvenciona este decreto, las empresas podrán solicitar las ayudas para conceptos subvencionables relacionados con la actividad para la inversión en terrenos e inmuebles, obra civil, bienes de equipo y equipamiento, programas informáticos y trabajos de ingeniería de proyectos y de dirección facultativa relacionados con las obras.

Exclusivamente en la línea de ayudas Industria 4.0 también se podrán subvencionar los conceptos relacionados con la adquisición de activos inmateriales, tales como patentes, licencias o softwares relacionados con la gestión productiva, logística o comercial; inversiones en hardware; gastos de consultoría externa para desarrollar e implantar los proyectos. Asimismo, también se subvenciona el coste del proyecto o análisis realizado por las empresas exigido para poder optar a esta modalidad.

La cuantía de la ayuda  será del 45, el 35 o el 25 por ciento de la inversión subvencionable, según se trate de pequeñas, medianas o grandes empresas, y será como mínimo de 2.000 euros para cada proyecto subvencionable.