ISABEL BARRANTES 

 

La Guardia Civil ha detenido a dos personas como supuestos autores de los delitos de estafa, usurpación del estado civil y falsedad documental al haber estafado a diferentes comercios de Montánchez y Mérida.

A mediados del pasado mes de diciembre la Guardia Civil recibió tres denuncias de diferentes empresarios de Montánchez por estafas con un modus operandi muy similar. Con este motivo se puso en marcha la operación “Monteviejo”, que finalizó con la detención de dos personas y otra que está siendo investigada.

Los supuestos autores de los hechos, consiguieron apoderarse principalmente de productos de embutido ibéricos y quesos en dos establecimientos de Montánchez, con un precio superior a los 9.000 euros.

Asimismo, intentaron cometer otra estafa en otra empresa por un valor de 3.152 euros, pero no lograron realizarla al no poder verificar su propietario el haber recibido el dinero de los productos encargados.

A estas personas se les implica en otro delito de estafa cometido en un establecimiento de Mérida, donde con el mismo procedimiento se apoderaron de tres patinetes eléctricos valorados en 900 euros.

El modus operandi que seguían era contactar telefónicamente con las empresas para realizar un pedido que urgente de productos dada la proximidad de las fechas navideñas. Éstos solicitaban la cuenta bancaria para realizar la transferencia de la cuantía de la compra, la cual le enseñarían cuando fueran a recoger los productos encargados.

Posteriormente, contactaban con un transportista que se anunciaba en una página online, a quien contrataban para recoger los productos en las empresas y llevarlos hasta Mérida, donde les esperaba uno de los detenidos para posteriormente llevarse los mismos a una nave de una localidad próxima, evitando con ello que el transportista viera el lugar de almacenaje.

El transportista, recibía una fotografía a través del teléfono móvil de la transferencia realizada al empresario, la cual enseñaba antes de recoger los productos encargados, consiguiendo los dos detenidos no ser identificados por ninguno de los empresarios, al realizar toda la transacción telefónicamente.

Del análisis minucioso de los justificantes de las transferencias realizadas, la Guardia Civil pudo determinar la falsedad de todos ellos, ya que consistían en un montaje a través de un programa informático, en el que se utilizaban datos y logotipos de diferentes entidades financieras, indicando una cuenta falsa desde la que supuestamente se realizaba la transferencia.

En cuanto a la persona que figuraba como la que ordenaba la transferencia, se pudo comprobar que se trataba de personas cuyos datos habían sido obtenidos en diferentes boletines oficiales que se encuentran en Internet, no teniendo nada que ver con los supuestos autores de los hechos.

Finalmente, la Guardia Civil ha podido determinar que este mismo modus operandi, está siendo utilizado en varias provincias, habiendo ocurrido hechos similares en la provincia de  Badajoz y varias de la comunidad andaluza, hechos que se están investigando para comprobar la autoría de los mismos.