Con la llegada de la estación otoñal el Valle del Ambroz se viste con un colorido y hermoso manto natural que se convierte en un verdadero regalo para los sentidos.

La cámara fotográfica se convertirá en el compañero indispensable para visitar el valle ya que permitirá al viajero inmortalizar sus paisajes, colores, olores y sabores. Una comarca llena de contrastes, con montañas que superan los 2.000 metros y zonas de vega y dehesa a solo 500 metros de altitud. Además de sus ríos, cascadas y gargantas, las montañas han marcado también su paisaje, con grandes bosques de castaños y robles en las umbrías, acompañados de terrazas cuajadas de cerezos y ciruelos, así como frondosas dehesas de encinas y alcornoques en la zona baja del valle.

Abadía, Aldeanueva del Camino, Baños de Montemayor, Casas del Monte, Gargantilla, La Garganta, Hervás y Segura del Toro son los ocho pueblos que integran este valle bañado por el río Ambroz y que este año celebra la décimo novena edición del “Otoño Mágico en el Valle del Ambroz”, Fiesta  de Interés Turístico Regional.

PUEBLOS CON UN GRAN LEGADO HISTÓRICO

Se trata de pueblos con historia habitados en tiempos pasados por romanos, celtas, musulmanes y judíos, y surcados por calzadas como la romana Vía de la Plata, Cañadas Reales, cordeles, el ferrocarril y, en la actualidad, por la autovía A-66 y la carretera Nacional 630.

“Emociones Compartidas” es el eslogan elegido para este año, en referencia al clima tan especial que genera la convivencia entre las personas que habitan el valle y las que acuden de fuera, generando nuevas amistades.

Hasta finales de noviembre esta comarca del norte de la provincia de Cáceres celebrará numerosas actividades, entre las que destacan la Fiesta de la Trashumancia o la Gran Calbotá. El visitante también podrá disfrutar de vistas guiadas a lugares con encanto, actividades infantiles y un raid de aventura.

Asimismo también habrá citas gastronómicas, concursos fotográficos, rutas BTT y actividades musicales y humorísticas, entre otras.